Omar Fuentes: “La atención humana y de calidad al paciente es nuestro sello”

Omar Fuentes es Técnico en Enfermería, egresado del Centro de Formación Técnica Santo Tomás sede Concepción en el 2013. Actualmente se desempeña como paramédico en el SAMU del Hospital Guillermo Grant Benavente y está finalizando la carrera de Enfermería en la UST reafirmando su vocación y formación en esta casa de estudios.

Desde pequeño, Omar escuchaba y observaba atento a las ambulancias pasar por su casa en el centro de Concepción y se imaginaba un trabajo que no lo hiciera estar en una oficina, sino uno que le permitiera salvar vidas.

Pero hubo un hecho que lo marcó y orientó su vocación: De regreso de un paseo familiar, fue testigo del volcamiento de uno de los vehículos que iba en el viaje. “Me tocó ver cómo parte de mi familia se volcaba en un auto, y pensé que se habían muerto, gracias a Dios no les pasó absolutamente nada, pero la primera institución que llegó fueron los Bomberos. En ese momento decidí que quería ser voluntario”.

Vocación por salvar vidas

Fueron 15 años los que Omar participó como voluntario del cuerpo de Bomberos de Concepción, lugar donde cuenta, rememoró su antigua pasión por las sirenas y las ambulancias, y nació su amor por el ámbito hospitalario. Motivado por estos hechos, decidió estudiar Técnico en Enfermería en el Centro de Formación Técnica de Santo Tomás, sede Concepción.

“Decidí estudiar Técnico en Enfermería en Santo Tomás, porque tenían la posibilidad de realizar los internados en el SAMU. Entonces, entré pensando que, si quería llegar a realizar mi práctica ahí, tenía que ser de los mejores. Ese fue mi objetivo, mi motivación y mi opción de vida”.

En Santo Tomás, explica, pudo obtener la formación y las herramientas necesarias para convertirse en un profesional capacitado. Su paso por el Centro de Formación Técnica fue relevante por varias

razones, entre las que destacan el apoyo de los docentes, la formación teórica y, sobretodo el hecho de que se le abrieron las puertas para realizar su práctica en el lugar donde siempre quiso trabajar.

“En Santo Tomás pude desarrollar habilidades duras y blandas, que para mí son un sello muy importante que tenemos como alumnos y que destaca en la atención humana y de calidad que brindamos a los pacientes”.

Sumado a esto, valora el “Sello Santo Tomás”, el cual, si tuviera que resumirlo en una frase, sería el “saber ser”. “El saber ser incorpora el saber teórico, independiente de la carrera; el saber hacer, que va ligado a las destrezas que aprendemos a ejecutar y, por otro lado, el saber ser, que va de la mano con lo que uno es como persona, y que como institución lo refuerzan constantemente”, asegura.

Hoy, Omar se desempeña en el Hospital Guillermo Grant Benavente, uno de los centros de alta complejidad más grandes del sur de Chile, como paramédico del Servicio de Atención Médico de Urgencias (SAMU), en las ambulancias que dan la primera respuesta ante las necesidades de salud de la población. Diariamente se ve enfrentado a las situaciones límites de vida o muerte, pero hay algo que lo reconforta, y es la gratitud de las personas a las que ayuda.

Por ello, recalca que la vocación y un corazón inquieto por ayudar son básicos para desempeñarse en el área de la salud. “El estudiante que ingresa a una carrera de la salud lo hace para prestar servicio a la comunidad, y en Santo Tomás cuentan con todo el apoyo y las oportunidades de realizar su práctica en los mejores campos clínicos del país”.

Nuevos desafíos

Motivado por su espíritu de liderazgo y por su inquietud de seguir aprendiendo, hoy día Omar se encuentra cursando el cuarto año de Enfermería en Santo Tomás, gracias a la beca de articulación que ofrece la institución.

“Me di cuenta de que mi objetivo es generar cambios en la salud, y para eso, hay que ser líderes. Por eso, quise seguir capacitándome profesionalmente en búsqueda de asumir cargos y riesgos mayores”.

Además de esto, sueña con hacer docencia en Santo Tomás y de esta manera, compartir su experiencia en el servicio de urgencias, como una manera de aportar a la institución y a los futuros profesionales. “Me gustaría retribuir todo lo que se me enseñó, porque me siento parte de la institución, tengo lazos muy fuertes con Santo Tomás, y así como ellos me ayudaron a capacitarme, yo quiero ayudar a otros”.