Claudio Lazcano: de coordinador de los Trabajos Voluntarios en Santo Tomás Viña del Mar a nuevo concejal de la comuna de Freirina

En su paso por la carrera de Trabajo Social, destacó por su participación en actividades de vida y gobierno estudiantil, sin dejar de lado un perfil académico que lo llevó a impulsar el seminario regional sobre migración en Chile.

El paso de Claudio Lazcano Rojas por la sede Viña del Mar de Universidad Santo Tomás estuvo lejos de pasar desapercibido. Mientras estudió Trabajo Social participó en diferentes actividades de vida y gobierno estudiantil, pero también destacó por su perfil académico y su visión profesional. Y aunque se podría pensar que su historia tomasina lo motivaría a echar raíces en la región, él decidió regresar a sus orígenes, a Freirina. Se reencontró con su tierra, comenzó a ejercer su profesión y este año dio un paso enorme al postular como candidato a concejal y ser electo con el 7,13% de los votos. Y en esta nueva etapa no olvida los años que vivió en las aulas de Limonares y 1 Norte.

Desde 2012 hasta 2016 participó en prácticamente todos los Trabajos Voluntarios de Invierno y Verano, donde cumplía labores de coordinador. Fue tal su compromiso que la Dirección de Asuntos Estudiantiles le entregó un reconocimiento por su desempeño y liderazgo. También fue parte de la directiva del Centro de Estudiantes de su carrera y de la Federación de Estudiantes de la sede. A nivel académico igualmente destacó: expuso en la cuarta edición del Encuentro de Jóvenes Investigadores que organizaba la carrera y fue impulsor del seminario regional “Una aproximación a la realidad de los migrantes en Chile: ¿Oportunidad o amenaza?” que tuvo varias versiones. No fue sorpresa, entonces, que a fines del 2016 se despidiera de la institución recibiendo el premio Santo Tomás como titulado destacado.

Cinco años pasaron desde su egreso de UST. En Freirina se acentuó su militancia comunista que lo llevó a presentarse como candidato a concejal de la lista “Chile digno, verde y soberano”. Resultó electo y a principios de esta semana asumió su cargo.

– ¿Siempre tuviste la intención de regresar a Freirina después de titularte?

“Sí, a Freirina hay que devolverle la mano. De aquí guardo buenos recuerdos de la infancia, con mi familia y amig@s. La ‘Revolución pingüina’ la viví aquí, tenía 15 años, desde ahí no me alejé del movimiento estudiantil y la Justicia Social. Esta tierra cobijó a mi abuelita Elsa Orrego García y Alfredo Rojas López, desde esa nostalgia era necesario volver. Ahora ellos no están, pero quedó su semilla honrando el valor de sus vidas”.

– ¿A qué te has dedicado desde que volviste?

“Volví a esta tierra buscando a la familia grande, la de mi partido, donde debía poner a disposición mi militancia para aportar en Freirina. Desde el último Congreso Provincial 2021 soy el secretario político de la Provincia del Huasco. Ha sido un gran desafío, pero esta provincia tiene un gran potencial. Asimismo, a nivel territorial fui presidente de la Junta de Vecinos Porvenir y Progreso de Vicuña Mackenna Alto, donde quedaron desafíos que hay reivindicar desde la concejalía”.

“En lo profesional, me desempeñé como Trabajador Social-Coordinador de la Oficina de Protección de Derechos Infanto-adolescentes de Freirina, coordinador de SENDA Previene Freirina, Oficina Social Municipal y como relator en habilidades comunicativas a dirigentes sindicales. Un mar de conocimiento con un centímetro de profundidad…”.

– ¿Cómo surgió la idea de postular a concejal?

“Esto no fue una idea personal, sino más bien el resultado de una discusión colectiva de la Célula Víctor Jara de Freirina. Desde esta perspectiva se asume el desafío colectivo junto a otros dos compañeros. Es en aquel espacio donde se barajan los elementos políticos que respaldan la candidatura, como arraigo territorial-identidad, años de militancia, juventud, profesión idónea al cargo, disposición, entre otras”.

– ¿Sientes que en el proceso de campaña y en lo que viene en el futuro como concejal puedes aplicar lo aprendido en Trabajo Social?

“Sin duda. El Trabajo Social es político, desde ahí hay que incidir en la política pública-social comunal para llegar al centro de los problemas de las personas y así aportar en mejorar su calidad de vida. En el marco de un Estado centralista, los más críticos de los críticos podrán decir que es insuficiente si no se aborda la estructura del sistema político, económica y social actual, sin embargo, el Chile de hoy nos llama a informar y remecer conciencias para rodear desde el territorio a una forma de hacer política en Chile que se tiene que acabar. Hoy nuestras comunidades pueden recoger la información disponible y tomar acción para transformar la calidad de vida de todas, todos y todes. Son cambios que esperamos y que se han toman su tiempo. Sin miedo ni duda, hay que estar a disposición”.

– Ahora que han pasado cerca de cinco años desde que te titulaste, ¿qué recuerdos tienes de tu paso por Universidad Santo Tomás?

“Guardo particular cariño por muchos buenos momentos vividos con mis compañeras y compañeros, también cuando fui presidente del Centro de Estudiantes de Trabajo Social (CETRAS) y encargado de los Trabajos Voluntarios de la Federación de Estudiantes que hicimos en varias comunidades de la región. Desde esos espacios se va fortaleciendo la vocación. La síntesis colectiva entre un grupo de jóvenes estudiantes era de que sí se podía forjar un Chile diferente y en esa estamos. El que fue presidente de la Federación en aquel tiempo, Luis Olivares Sepúlveda, cumplió un rol fundamental en la electividad de Ericka Portilla Barrios, constituyente electa de Atacama. Siendo parte de su equipo cercano de campaña, aportando desde su área profesional, la comunicación audiovisual, y sin duda en lo político territorial ¡el hombre sabe!”.

“Otro compañero es Sebastián Vallejos, hoy aportando desde su rol territorial y el fortalecimiento del Colegio de Trabajadores Sociales, donde hay un gran desafío. El compañero Giovanni Zamora también fue presidente de la Federación, hoy consagrado como muralista de gran nivel. Es gratificante ver como muchas personas con quienes cruzamos camino, no han perdido su esencia revolucionaria”.

“Asimismo, recordar cuando coordinamos con mi amigo y compañero David Guerra Suárez (a raíz de nuestra tesis de grado), el Primer Seminario de Migración en Chile, entre la Gobernación Provincial de Valparaíso, la Escuela de Trabajo Social de UST Viña del Mar y la Oficina de Movilidad Humana del Arzobispado de Valparaíso. Con expositores de gran nivel, atingencia temática y con el aula magna llena. A nuestro egreso, ese seminario se repitió dos veces más, fue un acto visionario. Nuestra profesora guía Carolina Jorquera Vásquez y la dirección de Escuela siempre apoyaron la iniciativa”.

“No puedo cerrar esta entrevista sin recordar a Diego Guzmán y Exequiel Borvarán, nuestros compañeros asesinados marchando por la Educación gratuita y de calidad. ¡Honor y Gloria!”