Enfermería y producción social en salud

Introducción

Existo a partir de un cúmulo de experiencias e historias, que han formado mi mirada enfermera con un profundo respeto por el rol de la sociedad en el logro de la salud. Creo fehacientemente en las potencialidades de la comunidad organizada para generar salud como producto social. Sé que se puede lograr, he compartido conocimientos con profesionales que no cuestionan la entrega de poder en la toma de decisiones en salud a las personas y he visto como ésto se refleja en comunidades sanas, participantes y deliberantes.

Salud como producto social (Organización Mundial de la salud, 2009):

Para lograrlo, planteo en primer lugar, una nueva perspectiva (Fig1) que visualice la acción de enfermería en la dimensión política de un país. Ser parte de la creación y gestión de políticas públicas es una necesidad y una prioridad. Para que la sociedad se oriente hacia el bienestar, debe tener sustento político que lo respalde. Nuestra labor es ser garantes y defensores de los derechos de las personas en todas las dimensiones de la vida en sociedad.

Figura 1. Quehacer enfermero hacia la producción social de la salud. S Godoy 2022.

En segundo lugar, necesitamos reconocer las acciones que los líderes vecinales y organizacionales han desarrollado en las comunidades: integrar estrategias, escuchar a las comunidades, organizar esfuerzos y relevar el rol social desde las bases, es esencial para que la sociedad se comprometa a aportar en el logro de la salud. Nuestro rol será hacernos partes de sus desafíos y generar instancias de apoyo a esa labor. El liderazgo en grupos sociales, no es coincidencia, es reconocimiento de historias compartidas, de metas alcanzadas y de tareas por cumplir. La validación social es la esencia de las acciones y objetivos aunados del sector salud con la comunidad.

Y como tercer elemento de aporte hacia la producción social de la salud, propongo ser orientadores en la toma de decisiones en salud de la comunidad. Nuestra profesión no nos hace conocedores de las historias de las comunidades, son las personas quienes deben reconocer sus necesidades y definir cursos de acción para mejorar su cotidianeidad. Nuestro quehacer es guiar las opciones de respuesta del sector salud, desde el conocimiento y recursos disponibles.

Conclusión:

Desde el paradigma de la práctica avanzada de la enfermería, requeriremos competencias de liderazgo, trabajo en equipo, conocimiento profundo de las comunidades y de recursos sanitarios para la acción comunitaria. Es urgente ampliar la labor profesional a un nivel concreto y profundo, en una sociedad que exige repuestas atingentes, coherentes y oportunas. No se trata de eludir responsabilidades, es exactamente lo opuesto, es responsabilizarnos por escuchar, apoyar y actuar de acuerdo con los intereses sociales, para un trabajo conjunto y de respuesta ajustada a la realidad de las comunidades que reciben nuestros cuidados y aportar directamente hacia la salud como producto social.

Referencias

Organización Mundial de la salud. (16 de Marzo de 2009). WHO. Recuperado el 25 de Marzo de 2022, de https://apps.who.int/gb/ebwha/pdf_files/A62/A62_9-sp.pdf