Desplazarte en bicicleta y/o caminar al trabajo – también conocido como transporte activo – podría ser una de las formas más factibles y económicas de incrementar los niveles de actividad física y reducir los factores de riesgo cardiovascular de la población chilena.

Un estudio reciente realizado en 5,157 adultos en Chile y que fue publicado en el prestigioso Journal of Public Health, liderado por el Grupo de Investigación ELHOC (Epidemiology of Lyfestyle and Health Outcomes in Chile), reportó que transportarse de forma activa disminuye en un 10% el riesgo de desarrollar obesidad y en un 19% el riesgo de desarrollar diabetes mellitus tipo 2 en comparación a personas que se desplazan en vehículo.

Académicos e investigadores pertenecientes al Grupo Científico ELHOC, plantean que en Chile actualmente cerca de un 25% de la población ocupa la bicicleta como medio de transporte, por lo cual, aún hay un gran porcentaje de la población que podría incluir este medio de transporte en su vida cotidiana.

“Si recordamos que las recomendaciones mínimas de actividad física que debería realizar una persona son 150 minutos de intensidad moderada a la semana, el uso diario de la bicicleta como medio de transporte podría contribuir a cumplir estas recomendaciones. Considerando que actualmente más de un 67% de la población chilena presenta algún grado de sobrepeso u obesidad y un 9.4% de la población tiene diabetes mellitus tipo 2, transportarse activamente al trabajo podría no solo ser una forma factible de dar cumplimiento a las recomendaciones mínimas de actividad física por una gran parte de la población, si no a su vez, una manera efectiva y de bajo costo para reducir los niveles de obesidad y factores de riesgo cardiovascular en el país”.

Estos resultados publicados sobre transporte activo y factores de riesgo cardiovascular en Chile, son de alta relevancia en salud pública, ya que esto podrían traducirse en una reducción en mortalidad en el mediano y largo plazo. Esto lo abala un estudio realizado en 250,000 mil personas, liderado por el Dr. Carlos Celis-Morales (Director del grupo de investigación ELHOC e investigador del Centro de Investigaciones Cardiovasculares de la Universidad de Glasgow en Reino Unido) en el se cual determinó que personas que se desplazan en bicicleta al trabajo reducen el riesgo de desarrollar cáncer en un 45%, mientras que el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares se reduce en un 46%, en comparación a aquellos que ocupan vehículos particulares para transportarse a sus trabajos. Este estudio también reportó que desplazarse en bicicleta al trabajo reduce en un 41% el riesgo de muerte prematura mientras que caminar al trabajo reduce en un 27% el riesgo de desarrollar enfermedades cardiovasculares.

Estos resultados podrían ayudar a implementar políticas de transporte activo, que mejoren la seguridad vial como también así la implementación de incentivos para personas que se transportan activamente a su trabajo, esto podría aumentar el número de la población que ocupa este medio de transporte.