Gabriel Márquez, alumno de Técnico en Educación Parvularia: “Mis compañeras me apoyan y están contentas con que un hombre sea parte de la carrera”

Oriundo de Curicó, decidió volver a la Educación Superior después de 10 años para cumplir su vocación estudiando en el Centro de Formación Técnica Santo Tomás Viña del Mar.

Gabriel Márquez sabe que está “haciendo historia”: es el primer hombre que se matricula en la carrera Técnico en Educación Parvularia 1° y 2° Básico en el Centro de Formación Técnica Santo Tomás Viña del Mar. En un ambiente que hasta el año pasado era exclusivamente femenino, él se integra para cumplir su vocación y para demostrar que los hombres también pueden involucrarse en el proceso educativo de los más pequeños.

Para seguir la tradición familiar, estudió primero Gastronomía Internacional y Tradicional Chilena en el CFT Santo Tomás de Curicó, desde donde egresó hace 10 años. Se trasladó casi inmediatamente a la Región de Valparaíso, donde ha trabajado en diferentes restaurantes, pero hace cuatro meses tomó la decisión de volver a las aulas.  “La verdad es que estudié Cocina por seguir los pasos de mis padres, pero lo que siempre me gustó fue la Educación, entonces ahora quise iniciar mi propio camino tal como lo hice cuando me vine del sur”, dice.

“Cuando estaba en el colegio, en la enseñanza básica, tenía muy buena relación con mis profesoras y con los directores, entonces si faltaba una tía me mandaban a buscar a mí para cuidar a los niños del kínder, también ayudaba a las tías a preparar los materiales, tengo harta paciencia y vocación. Siempre tuve ese sueño de hacer clases y ahora lo voy a conseguir”, asegura.

Esa convicción facilitó su ingreso a una carrera tradicionalmente femenina. Sabía que las cosas serían así, pero recalca que “nunca fue tema. Siempre me motivó estudiar en el área Educación, a pesar que en mi carrera la mayoría sean sólo mujeres, quiero que vean que los hombres también podemos ayudar en el crecimiento educacional de un niño”.

 El único hombre en la carrera

Gabriel cuenta que sus compañeras no se sorprendieron al verlo el primer día de la Semana Cero, ya que antes de ingresar a clases habían armado un grupo de whatsapp y todas sabían que sería el único hombre. “Sí, como que algunas se sorprendían un poco, decían ‘¿en serio vas a estudiar esto?’ y yo les respondo que sí, nada más. Se hizo un grupo súper bueno con las compañeras, hay un muy buen fiato, entonces nadie lanzó ningún comentario como que esta carrera es sólo para mujeres ni nada, al contrario, todas me apoyaron y están contentas con que pueda haber diversidad y que un hombre sea parte de la carrera”, cuenta.

Teniendo la experiencia de ya haber estudiado una carrera técnica en Santo Tomás, Gabriel sabe que el tiempo pasará rápido y que en un futuro muy cercano podrá ejercer como Técnico en Educación Parvularia: “Tengo las mismas ansias que tenía cuando entré por primera vez a estudiar. Ya me imagino trabajando, eso es lo que me motiva, pienso en esos nervios de llegar el primer día a un colegio y que vean que el ayudante de un profesor es un hombre. Estoy con todas las ganas, muy motivado y creo que las herramientas que me va a entregar Santo Tomás para fortalecer lo que yo sé, serán muy buenas”.