“Ahora podemos transmitir a la población nuestros conocimientos sobre VIH de una manera más amigable”

  • Natalia Osega y Dahián Irribarra, alumnas de quinto año de Tecnología Médica, se capacitaron para realizar test rápido de VIH y fueron protagonistas en jornada de actualización organizada en Santo Tomás Viña del Mar.

Hace unas semanas, las estudiantes de Tecnología Médica Natalia Osega y Dahián Irribarra se certificaron en toma de test rápido de VIH junto a otros tres estudiantes de Santo Tomás Viña del Mar. Y hace pocos días, ambas fueron protagonistas de la “Jornada de Actualización de Apoyo al Diagnóstico VIH y Capacitación en Test Visual Rápido” organizada por el Comité de Prevención que funciona bajo el alero de la Dirección de Asuntos Estudiantiles. Natalia tuvo un importante rol en la coordinación y organización del evento, mientras que Dahián fue una de las expositoras y contó su experiencia tomando este test y teniendo que comunicar un resultado reactivo.

“Yo vengo de una población vulnerable, donde se desconoce mucha información, no hay una buena educación ni sexual ni académica ni nada, entonces siempre me ha motivado ayudar desde un punto de vista más profesional a agrupaciones activistas, como las Mujeres con Energías Positivas. Quizás es un error, pero la gente te ve con uniforme y le toma más peso a tus palabras que a las de alguien que no es tecnólogo médico, por ejemplo. Entonces desde ese lugar privilegiado de conocimientos sobre el VIH nace la motivación de poder transmitirlos a la población de una forma más amigable”, cuenta Natalia. Dahián dice que “recordé mis tiempos de colegio, yo hacía mucho esto. Me gustó cómo se dio la dinámica, fuimos conociendo a las agrupaciones, a los activistas, y así surgió la invitación para la certificación”.

Un primer acercamiento con el tema lo vivieron en la Feria Preventiva de Salud Biopsicosocial que la DAE organizó el primer semestre. “Ahí no estábamos capacitadas, nuestro rol era motivar a los estudiantes para que se hicieran el test a manos de gente que sí estaba capacitada. Ahí nos dijeron que si nos interesaba el tema, podíamos certificarnos para tomar test rápido”, recuerda Dahián. Natalia agrega que “esa vez el enfermero de Prevención Viña vino solo, entonces nos pidió que lo ayudáramos porque no podía con todo. El hacía el test y nosotros captábamos personas y les explicábamos lo que es el periodo de ventana, por ejemplo. Se nos dio bien y ahí enganchamos para capacitarnos”.

Test rápido de VIH y el primer resultado reactivo

Después de certificarse, quedaron capacitadas para tomar tests rápidos, lo que acarrea otra responsabilidad: comunicar los resultados. “A mí ya me tocó comunicar un resultado reactivo. La primera vez que fuimos a terreno me planteé todas las dudas, no sabía cómo lo iba a hacer porque no puedes ser muy fría para decirle a alguien que su resultado es reactivo, pero tampoco puedes dejar que la emoción te afecte. Yo soy técnico en enfermería, trabajo en Unidad de Cuidados Intensivos y me ha tocado recibir pacientes que están mal en muchos aspectos, entonces ya conozco esa parte, la empatía que se debe tener frente a personas que se bloquean, que en el momento no escuchan las palabras de aliento que les tratas de dar porque simplemente se nublan”, recuerda Dahián.

Natalia recuerda que “yo estaba ahí y fue como si yo fuera la Dahián, estaba muy nerviosa y el enfermero nos calmaba a las dos. Fue más difícil porque el resultado era de anticuerpos positivo, eso quiere decir que la persona había adquirido el VIH hace mucho tiempo. Después supimos que la persona sí sabía, pero estaba en etapa de negación, incluso había estado con tratamiento y lo abandonó. Dentro de la consejería se fue dando la confianza hasta que contó toda su historia”.

Ambas agradecen que la jornada de capacitación como la que organizó Santo Tomás Viña del Mar les permite “humanizar su labor” y dar un paso más allá del conocimiento científico. Por lo mismo, motivan a quienes participaron en esa actividad a poner en práctica todo lo aprendido: “Nosotras salimos a terreno, conocemos agrupaciones y vamos aprendiendo. Por ejemplo, para saber dónde derivar a personas con resultado reactivo y que necesitan consejería o apoyo. Lo positivo es que hay interés de los estudiantes de Santo Tomás. Todos los que participaron en la capacitación van a llegar a su casa a contar lo que hicieron, así la gente se va educando y el día de mañana se van a acercar sin miedo en las Ferias Preventivas, por ejemplo, van a querer saber más no solo de VIH, sino de educación sexual integral”.