Trabajo de investigación de académica de Santo Tomás Los Ángeles obtuvo primer lugar en Congreso Iberoamericano de lactancia materna

Investigación de Santo Tomás fue el trabajo mejor evaluado de los 14 en competencia

“Relación entre la duración de lactancia materna exclusiva y la ingesta calórica en niños de 5 a 7 años en un CESFAM de la comuna Los Ángeles” fue el trabajo de investigación, en formato poster, que obtuvo el primer lugar en el Congreso Iberoamericano de lactancia materna, salud integral y desarrollo infantil “Los primeros 100 días”, que se realizó entre el 7 y 9 de noviembre en Lima, Perú.

Nicole Lasserre-Laso, académica de la carrera de Nutrición y Dietética de Universidad Santo Tomás Los Ángeles, responsable de esta presentación, explicó que se trató de los resultados preliminares de su investigación, provenientes de una prueba piloto realizada el año 2018 en un CESFAM de la comuna, donde se probaron los instrumentos y mediciones, para luego replicarlos este año en un mayor número de personas. Lo anterior, en cinco ciudades de Chile de norte a sur, para representar de mejor forma a la población de Chile y su geografía. Así se contó con el apoyo de Santo Tomás, en las sedes Iquique, Talca, Temuco y Puerto Montt.

En entrevista, la profesional relató respecto de su experiencia en el certamen y del desarrollo de este trabajo, cuyo objetivo es evaluar mecanismos, a través de los cuales, la lactancia materna puede proteger contra la obesidad a futuro.

¿Qué se mide en este trabajo?

Existe bastante evidencia que demuestra el rol de la lactancia materna en la protección contra la obesidad infantil, pero no se sabe por qué, qué es lo que aporta la lactancia o qué efecto tiene para que un niño sea menos obeso que otro que no recibió lactancia, considerando que ésta es una enfermedad multifactorial. Entonces, lo que está buscando este proyecto es determinar si la duración de la lactancia materna tiene alguna relación con la ingesta de energía de niños y niñas de 5 a 7 años de 5 ciudades de Chile y la conducta que ellos tienen al comer, a través de la aplicación de un cuestionario validado.

Para esto, estamos evaluando al niño o niña y a su apoderado, además, revisamos sus cuadernos de salud, donde los profesionales tuvieron que registrar en cada consulta (desde el nacimiento) qué tipo de alimentación tenía el niño hasta el año y el retiro de fórmulas lácteas. Esto último, lo complementamos con algunas preguntas a la mamá para determinar cuánto duró la lactancia materna en ese niño o niña.

¿Cómo surge esta investigación?

Siempre me ha interesado el área pediátrica y la lactancia materna es el primer alimento que el bebé recibe, el primero y debiera ser el único, hasta el sexto mes. A la leche materna y la lactancia se le han atribuido beneficios que tienen que ver con la salud del bebé, de la madre e incluso beneficios sanitarios y económicos para los países y las familias, sin embargo, al realizar la fundamentación del proyecto, encontramos un vacío en el conocimiento sobre por qué logra generar este efecto protector contra la obesidad infantil, por ahí surgió el desafío, ya que además Chile lidera los rankings de obesidad a nivel mundial. Por tanto, esta información obtenida con el proyecto podría contribuir a generar estrategias de prevención temprana para la obesidad infantil.

La investigación finaliza en diciembre de este año con la recolección de datos y en enero 2020 se presentará el informe final con resultados.

¿Qué recomendación le darías a las mamás que no pueden amamantar por falta de leche?

Se ha demostrado que el recibir apoyo en la parte de prenatal ayuda mucho a enfrentar los problemas de la lactancia, porque la lactancia tiene muchos beneficios, pero también es difícil; entonces si te preparas antes es mucho más fácil que no abandones la lactancia en esos momentos difíciles.

Les diría que existen grupos de apoyo a la lactancia materna (GALM), que existen asesoras de lactancia, grupos en redes sociales y clínicas de lactancia. En los Centros de Salud Familiar, por ejemplo, tienen la obligación de atender en menos de 2 horas a una mujer que consulta de forma espontánea por problemas de lactancia (“consulta de alerta”), entonces deben informarse y buscar apoyo tanto antes de que nazca el bebé, como después y durante.

Recordar también que los problemas de lactancia se pueden dar durante todo el periodo, pero sobre todo se dan en las primeras etapas, entonces la mayor recomendación es acceder a los grupos de apoyo a la lactancia materna, donde pueden compartir con otras madres, padres y profesionales sus experiencias para reforzar el vínculo.

Si no hay producción de leche, es porque no hay estímulo y si no hay estímulo, es porque probablemente al principio, el bebé no se acopló bien o no estaba succionando bien. Entonces, con un buen apoyo de un asesor en lactancia es súper fácil hacer que las mamás produzcan o vuelvan a producir leche. Ideal es contar con un equipo multidisciplinario y que el pediatra también sea prolactancia.

Hoy día se sabe que mientras antes se incorpore la leche de vaca, ese niño tiene más posibilidades de ser obeso, por eso, si el niño recibió una fórmula artificial o “relleno”, lo ideal es recuperar la lactancia, hasta los dos años o más, según cada madre y bebé quieran, porque toda mujer que ha tenido bebé tiene la capacidad de producir leche y son muy pocos casos en los cuales hay un problema de la producción. En suma, se puede recuperar la lactancia y hay que estimularla, entonces el llamado a informarse respecto de cómo hacerlo.

Cabe destacar que la lactancia no tiene horario y es a libre demanda; es decir, cuando el niño lo quiera y eso fue lo que más recalcaron en el congreso. Las matronas hablan de que como máximo tú puedes esperar hasta tres horas, porque hay veces en que los bebés duermen mucho. Si tú esperas que el bebé despierte o llore para comer, puede ser que pasen más de tres horas, por eso se habla de un horario, pero es importante que no se entienda que la lactancia debiera ser estrictamente cada tres horas ya que se deben respetar los ritmos biológicos del bebé que se están adaptando.

¿Qué consideras que le falta a Chile en esta materia?

Esa es una gran pregunta y como profesionales, un gran desafío también. Si bien, hoy contamos con Orientaciones Técnicas para las clínicas de lactancia, guías y normas que apuntan a su protección, aún falta mucho por hacer en términos de políticas públicas. Una de ellas es contar con un mayor número de profesionales instruidos, que tengan las certificaciones para ser asesores (as) de lactancia. En esta misma línea, las mujeres en Chile apenas tienen a sus bebés debieran tener mínimo una hora de apoyo a la lactancia materna en el hospital o clínica, eso hoy no está regulado, a pesar de que existe una iniciativa de la OMS/UNICEF que se denomina Hospitales Amigos de la Lactancia Materna. En Chile, las acciones concretas no se observan en todos los centros de salud, mientras que en otros países, como por ejemplo Estados Unidos, cuentan con publicidad televisiva que apunta a los riesgos de no amamantar a las y los bebés.

La buena noticia es que creo que cada vez somos más profesionales que estamos involucrados en el ámbito de la lactancia materna. A raíz del mismo Congreso de lactancia, he visto profesionales de distintas áreas, como terapeutas ocupaciones, fonoaudiólogos, odontólogos, enfermeras, matronas, nutricionistas, pediatras, entre otros más, interesados en el trabajo de investigación y en continuar fomentando la lactancia materna. Antes, los pediatras, por ejemplo, frente a cualquier dificultad con la lactancia recomendaban una fórmula para apoyar, siendo una gran barrera para los demás profesionales, en cambio hoy hay muchos médicos informados sobre los beneficios y técnicas para apoyar la lactancia.

Santo Tomás, por su parte, imparte en el pregrado los conocimientos de la importancia de la lactancia y en la carrera de Nutrición y Dietética de Santo Tomás Los Ángeles, hay un electivo de lactancia materna, en el que se abordan aspectos fisiológicos y técnicos para comprender este proceso.