Lo que marcó el debate presidencial

El primer debate televisivo gustó, el formato a la europea permitió a los candidatos ser protagonistas, destacando su dinamismo y la fluidez en las interacciones de los presidenciables; por su parte los periodistas tuvieron una participación justa ordenando el diálogo, cumpliendo a la perfección su rol ya que no se expusieron con preguntas sesgadas.

Desde la perspectiva de la Comunicación Política, José Antonio Kast por lejos es quien mejor se manejó en este esquema, con ritmo y sentido de TV. Supo lanzar los dardos y ocupar bien el tiempo, con auto control, sacó chispas y le enrostraron sus posturas extremas y conservadoras, pero no lograron que explotara y esto es claramente un dominio en sus habilidades comunicacionales.

En cambio, Yasna Provoste, la más débil, se expuso con un bajo nivel de argumentos y pobreza conceptual, nerviosa e incómoda, cuando intentaba acercarse a la izquierda Gabriel Boric le recordaba su partido político. Además, fue quien provocó el momento bajo del debate, con el episodio Wikipedia, un traspié gratuito que se recordará: ´lo dice wikipedia´ cuando acusó de lobbysta a Sebastián Sichel, quien de inmediato le refuta su fuente.

Algunas jugadas del debate. Kast hizo que Artés criticara a Boric; Boric ocupó las preguntas de Artés para hablar de su programa; Sichel cuando le pregunta a Kast terminó en varias ocasiones defendiéndose; y jaque mate de Kast a Provoste, quien se desbordó y alteró cuando le aludió los 600 millones perdidos en el ministerio de Educación, nadie se había atrevido públicamente a sacarla al pizarrón de esa manera.

Usualmente, los debates sirven para reafirmar la opción presidencial, pero hasta ahora todo queda abierto. Boric no brilló, pero cometió pocos errores a pesar que en momentos fue atarantado e impulsivo, Sichel conectado con el sentido común y no logró frenar a Boric, Provoste decepcionadamente débil, Kast técnico y con preguntas inteligentes, profundizando el discurso de derecha y Artés 2021 es el mismo del 2017.

Qué se puede advertir de aquí a las elecciones de noviembre, considerando que este miércoles comenzó el periodo oficial de propaganda electoral, el primer cuadro, que Sichel tiene que arriesgar más para consolidar una distancia con Kast y, a su vez, demostrar que es el candidato competitivo ante Boric, quien hoy es el favorito de las encuestas; el segundo análisis, que puede resultar probable que a Kast le vaya mejor que a Provoste, en 2017 Kast sacó un 8% y Goic un 6%, sin duda que las cosas han cambiado, pero hay que tener en cuenta que el voto del republicano es duro.

Por último, nuevamente, consignar la estructura del debate, que, si bien resultó ágil, también tuvo espacios polarizantes y con poca profundidad en los temas planteados; en todo caso, señalar, por los pro y contras, que este diseño no es el preferido del campo de estudio de la opinión pública, ya que puede prestarse para que los candidatos se expresen con ciertas fake news, sin la posibilidad que el moderador los intervenga desmintiéndolos. No obstante, hubo consenso en las redes sociales que el formato gustó.