La línea silenciosa de los ingenieros

En conmemoración del gran operativo de remoción de escombros y reconstrucción de edificios por un terremoto que azotó la ciudad de Santiago el 13 de mayo de 1647, se estableció el 14 de mayo -día en que comenzaron los operativos- como el Día Nacional del Ingeniero o Día Nacional de la Ingeniería en Chile.

Es cierto que hoy los profesionales de salud son la gran primera línea, quienes, desinteresadamente, han puesto sus capacidades al servicio del país. Sin embargo, científicos, empresarios e ingenieros piensan incesantemente, en como aportar con un grano de arena en la lucha contra esta pandemia.

Las plataformas en línea han desafiado a los ingenieros a proponer soluciones. La escasez de mascarillas se enfrentó con impresoras 3D; los FabLab se pusieron a disposición de estas necesidades, así como las universidades que se involucraron rápidamente en buscar una solución de acceso económico y de simple ejecución para los ventiladores mecánicos. Un caso emblemático es Dave Rothamer, profesor de ingeniería mecánica y experto líder en motores de combustión interna de la Universidad de Wisconsin-Madison, está aprovechando las herramientas que utiliza para medir las partículas emitidas por los motores de combustión para un nuevo propósito: ha convertido los instrumentos para poder medir la eficiencia de filtración de diferentes materiales candidatos para mascarillas.

Los ingenieros son una línea silenciosa, altamente efectiva para apoyar en las soluciones cotidianas. Seguiremos en esa línea, investigando, proponiendo soluciones, alternativas e innovación, porque tenemos claro y hoy más que nunca, que solo juntos poder hacer un mundo mejor.