Fiestas de fin de año y la enfermedad de Alzheimer

Las festividades de fin de año se acercan a pasos agigantados y la mayoría de las familias se reúnen para celebrar y compartir.  Muchas familias pueden tener entre sus miembros personas que padecen de Alzheimer, lo que no impide que la celebración pueda ser un momento de armonía familiar y esparcimiento.

A continuación, se entregan algunos consejos que pueden ayudar a hacer de estas fiestas un grato momento:

• Continúe con rutinas, mantenga actividades y horarios. Esto evitará agitación y cambios en su comportamiento.
• Celebre en un ambiente conocido y familiar. Esto evitará gatillar una descompensación de la persona.
• Comente a familiares o amigos que no conocen detalles de la situación de salud de su familiar sobre el estado actual de la persona y dé pautas básicas para la interacción.
• Procuren conversar por turnos, para ayudar a la persona a entender y evitar confusión.
• No abrumar con saludo en el momento de llegada de visitas. O bien, frente al saludo es recomendable que se dirijan a la persona de uno en uno y de manera tranquila.
• Explique qué se celebra, lo que está pasando. Esto evitará confusión. Repítaselo si es necesario.
• Evite decorar en exceso. Las luces, los colores fuertes y llamativos de la decoración navideña, suelen ser un factor que desconcierta y desorienta a la persona.
• Celebre tranquilo, favorezca un clima relajado, sin mucho ruido.
• Permita el descanso. Cuando note a la persona cansada, invítela a descansar.
• No obligue a participar de toda la reunión, acepte la decisión de la persona.
• Permita la participación (dependiendo del grado de la enfermedad), asigne tareas o permita colaboración para decorar la casa, armar el árbol de Navidad, hacer el pesebre, preparar alimentos, poner la mesa. Recuerde que lo más importante es el proceso, la participación y no el resultado.
• No descuidar aspectos relacionados con la seguridad. Por ejemplo, evite las velas y adornos que pueden ser confundidos con comestibles. Además considere mantener la vigilancia y puertas cerradas, para evitar fugas.
• Procure tranquilidad pre y post festividad, haga que unos cuantos días antes y después de un evento sean tranquilos y relajantes. Esto evita descompensaciones en la conducta de la persona.
• Retirar la decoración una vez finalizadas las fiestas para no crear confusión.
• Lleve a cabo una celebración íntima. Es mejor evitar grandes festejos si su familiar se encuentra en un grado avanzado de la enfermedad.

Y finalmente como familiar y/o cuidador es importante que considere:

• Escoger actividades, tradiciones o fiestas que sean más importantes para usted. Organícese y disfrute.
• Aceptar ayuda, delegue actividades, permita que los demás le ayuden, y sea claro sobre lo que necesita que hagan.
• Resistir las presiones del medio de celebrar de la forma que otros esperan.
• Simplificarse con los preparativos y durante la celebración

Finalmente, recuerde que lo importante es vivir el momento presente y hacerlo con alegría. Las personas afectadas por la enfermedad, independiente del grado de avance de ésta, siempre se van a dar cuenta del cariño, del afecto, de la cercanía, de la calidez de los seres queridos. Esa persona está aquí y ahora, y aunque con determinado grado de merma, piensa, siente, se emociona y tiene derecho a ser parte de estas festividades.