Educación Física Escolar: Formación de hábitos saludables y reflexión
A través de la historia el ser humano siempre ha mostrado preocupación por su salud, la cual ha sido entendida como un valor para vivir, y como contraparte se ha entendido a la enfermedad como un camino hacia la muerte. Sin embargo, en la actualidad es posible constatar la alta prevalencia de enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT), las cuales han sido provocadas principalmente por hábitos no saludables, como son llevar una dieta y descanso inadecuados, fumar tabaco y beber alcohol en exceso, horas de sueño inadecuadas, trae consigo muchas patologías e importantes gastos en terapias para las personas y el estado.
Esto ha tenido un efecto en ámbitos gubernamentales y también educacionales, en donde se han elaborado medidas para revertir esta situación. Por ello, es importante considerar que la escuela tiene como una de sus asignaturas troncales a la Educación Física.
En ésta se ha venido observando una repercusión de los problemas de salud que aquejan a las sociedades modernas, esto queda de manifiesto en el currículum escolar, el cual ha experimentado una evolución a través de la inclusión del termino salud en sus contenidos. Según las autoridades educativas pretenden plasmar una preocupación social por el tema de la salud, haciendo énfasis en la prevención de las enfermedades provocadas por conductas insanas, promoviendo el desarrollo de hábitos saludables como la práctica de actividad física y otros, como llevar una dieta y descanso adecuado, no fumar tabaco y no consumir alcohol en exceso, a través de los conocimientos sobre el cuidado de la salud y su práctica.
Sin embargo, pese a todas las innovaciones curriculares, se puede constatar que en la actualidad, luego de algunos años de implementación de reformas orientadas al cuidado de la salud en Educación Física, la situación de los hábitos de vida de la población Chilena sigue mostrando una tendencia hacia el desarrollo de hábitos inadecuados.
Prevención del sobrepeso
Los proyectos y programas implementados en Chile para la prevención del sobrepeso, obesidad, sedentarismo y disminución de enfermedades crónicas han demostrado tener un alcance muy limitado. Las cifras en relación con esta epidemia y factores no han disminuido en el tiempo a pesar de que ha existido una alta preocupación por parte de las autoridades.
Los focos de atención de estas iniciativas se han centrado en dos grandes polos; la alimentación y disminución de sedentarismo. Sin embargo La encuesta Nacional de Salud del año 2009-2010 determino que la población Chilena presenta un 88,6% de sedentarismo. Para combatirlo todas las miradas se han dirigido a la Educación Física Escolar con la inclusión del término de salud y el potencial que esta actividad posee para contribuir a superar estos males.
Por otro lado, el SIMCE de Educación Física siguió revelando que existen muy bajos estándares de condición física en los escolares de 8º Año y también se observa que la densidad motora durante las clases es tan baja que no logra ser un factor desequilibrante.
La atención centrada en Educación Física nos invita reflexionar sobre el tipo de prácticas desarrolladas por los escolares, todos los resultados y datos obtenidos por (ENS, 2009)(SIMCE EDUCACIÓN FÍSICA, 2013)(NASPE, 2011) no generan los resultados, adherencia, y resultados de aprendizajes transcendentales en los escolares.
El desafío debería ir orientado a que los escolares practiquen la educación física y un estilo de vida saludable de manera permanente y fuera del horario de clases para toda su vida, es aquí donde el tipo de enseñanza-aprendizaje provocado en nuestros estudiantes no esta generando lo esperado, tener en consideración aspectos personales, culturales, sociales, ambiente, crecimiento, desarrollo, maduración, modelos de enseñanza y aprendizaje, profesores altamente capacitados, empoderados y por sobre todo empático y humanos en relación a nuestros estudiantes, marcaran la diferencia y permitirán cumplir los objetivos.
La pregunta es ¿Qué actividad física puede satisfacer dichas necesidades y desarrollar ese tipo de aprendizaje en los primeros años? La propuesta va orientada al desarrollo del juego, en las clases de Educación Física (González-Cutre, et al 2009) establecen el “flujo disposicional” instancia donde los escolares trabajan desarrollando al máximo sus capacidades de inclusión, no eliminatorio, posibilidades de roles, incitación al movimiento permanente, capacidades perceptivas, decisión y toma de respuestas, lo que claramente permite al escolar estar totalmente concentrado en la actividad.
Ciertamente esto deja de manifiesto una posibilidad y también un vacío investigativo respecto del tema pues se debe estudiar la manera en que el juego ayuda a que el niño se interese por la práctica de actividad física y adhiera a un estilo de vida saludable.
Por ende, es valido y necesario preguntarse ¿cuál ha sido el aporte real hasta el momento de la Educación Física Escolar? ¿ha dejado en el alumnado una huella en la formación de hábitos saludables que pudiesen perdurar en el tiempo? ¿ha desarrollado solidos conocimientos acerca de la actividad física saludable una vez egresados del sistema escolar obligatorio?¿será este el objetivo fundamental y último de la educación física en contexto escolar?