Por segundo año consecutivo se concretó el proyecto “Aulas Abiertas” que impartió talleres teóricos y prácticos de Informática, Ingeniería, Salud, Odontología, Recursos Naturales y Actividad Física y Deportes.

Un curso de mechones y otro de avanzados fueron parte del segundo año del proyecto “Aulas abiertas”, ejecutado por Santo Tomás y Senama, con el apoyo de los municipios de Rancagua y Graneros. El objetivo era desarrollar un programa integral que promueva el bienestar y la calidad de vida de las personas mayores, involucrando a estudiantes de diferentes carreras en experiencias significativas de aprendizaje en contextos reales, fomentando la conexión intergeneracional

Es así como la malla formativa incluyó talleres de primeros auxilios, cuidado podológico e higiene oral y protésica con las carreras de Salud y Odontología. En Recursos Naturales, pudieron aprender de hierbas medicinales y huertos domiciliarios. Cuidado digital, redes sociales, correos y trámites fueron los temas de Informática. Cuerpo humano, flexibilidad, fuerza y movimiento los ejercitaron con docentes y estudiantes de las carreras del área Actividad Física y Deportes. Por su parte, el equipo de Ingeniería les enseñó sobre mantenimientos recurrentes que surgen en casa.

Los “tomasinos” mayores

Rita Silva junto al estudiante de Informática, César Aros.

“Vamos que se puede, abre tu mente”, se escribe Celia Céspedes Orellana a sí misma en su cuaderno. Participa por primera vez en “Aulas abiertas”, ya que el año anterior no pudo integrarse: “Tengo vértigo y otras enfermedades, pero ahora pude venir sola, es un gran logro para mí. Mis compañeras de la villa también vinieron y las clases son estupendas, sobre todo la de Actividad Física que me hizo muy bien”.

En su segundo año en el proyecto, Rita Silva López destaca la labor de los profesores y estudiantes: “Tienen mucha paciencia, uno pregunta y ellos responden. Me gusta todo lo que he aprendido. Los estudiantes nos apoyan, nos ayudan, se puede conversar y son muy amables. Para uno, como persona mayor, es como que fuera primero básico, pero lo disfruté mucho”.

En la ceremonia de certificación – donde los participantes recibieron sus diplomas junto a autoridades de Santo Tomás y Senama, además de los alcaldes de Rancagua y Graneros – Fernando Pizarro entregó su testimonio en representación de sus compañeros: “Estamos muy contentos. Algunos faltaron por salud o trabajo porque, aunque no lo crean, hay personas mayores que seguimos trabajando. Pero esperamos continuar un tercer o cuarto año y luego salir egresados y seguir en la universidad Santo Tomás en Santiago. Misión cumplida y gracias por el favor concedido”, aseguró quien pertenece al grupo de avanzados.