Core Provincia de Colchagua: Mauricio Donoso

“Debemos ser más empujadores de proyectos de innovación y no tanto receptores de lo que llega”

El integrante del Consejo Regional apunta a la urgencia de que las iniciativas financiadas por la entidad, en esta materia, se vinculen con las áreas productivas de O’Higgins. Además, asegura que parte de las propuestas de este estilo son repetidas e intentan imponer modelos probados en otros lados del país.

“Es todo aquello que hace progresar a la región, introduciendo en ella, en las diversas áreas, nuevos modelos, instrumentos o técnicas, para explotar partes de la producción o desarrollo, de capacitación, entre otras cosas”. Así entiende la innovación el consejero regional Mauricio Donoso, quien en el suplemento Innóvate explica los avances que ha habido en dicha materia en la Región de O’Higgins, además de cómo impulsan el tema desde el Consejo Regional (Core). Al respecto, el presidente y vicepresidente de las comisiones de Régimen Interno y de Agricultura, correspondientemente, posee una visión crítica sobre la labor de la entidad, en cuanto a lo que el Estado les permite hacer.

“Podemos aprobar o rechazar ciertos proyectos que traen otras universidades, bajo el criterio de que sean iniciativas potentes. Pero podemos hacerlo con lo que nos llega, no es posible incentivar que haya propuestas de innovación. Eso hace una gran diferencia, porque es el Poder Ejecutivo el que podría estimular que traigan sugerencias con características relevantes para este lado del país, según su producción”, sostiene la autoridad, observando las restricciones de su rol y el de sus colegas.

Se trata de un escenario lamentable, a su juicio, pues “no siempre todos los proyectos son buenos para la región”. Y es que en sus palabras, muchas veces han sido postulados para la realidad de otras regiones “e intentan imponer el mismo modelo” en O’Higgins.

De acuerdo con Donoso, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (Fndr) y del de Innovación para la Competitividad (FIC), el Core hoy costea iniciativas que procuran conseguir un nuevo foco. Desde estas directrices destinarían alrededor de $3 mil millones cada año, aunque se debe considerar que también se invierten en propuestas con arrastre, que vienen de periodos anteriores. “¿Cuál es el problema que por lo general tienen este tipo de propuestas? Algunas son muy buenas, pero no están conectados con el área productiva regional”, reitera.

“Nosotros (durante el Gobierno de Sebastián Piñera) hicimos una iniciativa con los perros, burros o llamas guardianes de ganado ovino en el Secano. Terminó la investigación de esos tres años, se experimentó y concluyó que era bueno. Sin embargo, no se unió con el área productiva”, comenta. En su opinión, esto impidió que la idea fuera aplicada por otros emprendedores, obstaculizando la entrega de ayuda que podría haber mejorado sus negocios.

Falta conectar las buenas propuestas, validadas en la región, con un área productiva donde se pueda continuar y multiplicar el proyecto. En tres años (por el plazo de ejecución de las iniciativas) se prueba esto (en las indagaciones), pero no se masifica. Eso es lo que debemos conseguir. Ahí es cuando el Ejecutivo debe decir ‘hay una buena propuesta de innovación, hagámoslo’, llevándolos a cabo vía Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap), Comisión Nacional de Riego (CNR) o con la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo)”. Para él, es fundamental que el Estado encauce estas investigaciones y las ponga en práctica en la realidad de heterogéneos emprendedores.

Respecto a las áreas en las que pretenden innovar los proyectos que requieren financiamiento del Core, el consejero explica que esto ocurriría tanto en el proceso como en el producto, además de haber novedades en el objeto de estudio en ciertas áreas, pero que generalmente se concentran en las áreas económicas más conocidas de esta zona de Chile. “Hablamos del sector minero y agrícola, aparte de la capacitación en potencialidades como la (temática) energética. Hacia allá van orientados”, agrega.

En ese sentido, Donoso afirma que los recursos, otorgados vía Core, son suficientes. “Es necesario orientar y colar bien las propuestas. No creo que falten proyectos, sino que el Ejecutivo debe incitar a las universidades y centros de formación a que levantan estas iniciativas, en aquellos elementos problemáticos que son propios de la región, acudiendo a los planteles más preparados”, manifiesta.

“No podemos ser receptores y que nos llegue todo desde afuera, porque hay mucha propuesta repetida, no muy buena. Incluso algunos ya han sido presentados en la región. Hay uno del álamo, que fue postulado hace 8 años, no tuvo buenos resultados, y volvió a ser presentado en la región, después de haber obtenido financiamiento (la otra vez). Entonces uno piensa, ¿estamos haciendo mal el coladero? Nos falta agresividad: ser más empujadores y no tanto receptores de lo que llega. Tenemos que ver cuáles son nuestros déficit de innovación y apuntar ahí”, subraya el ex seremi de Agricultura durante la administración de Sebastián Piñera.

Encuentra esta entrevista en el suplemento Innóvate O’Higgins, proyecto ejecutado por Santo Tomás,  financiado a través del Fondo de Innovación para la Competitividad del Gobierno Regional de la Región de O´Higgins y su Consejo Regional enmarcado en la Estrategia Regional de Innovación.