Decano de la Facultad de Salud es nombrado Coordinador del Consejo para la Universalización de la Atención Primaria de Salud

El organismo transversal asesora a la Comisión Nacional para la Universalización de la Atención Primaria con el objetivo de planificar una APS universal como política de Estado.

La ministra de Salud, Begoña Yarza, presentó hace unas semanas atrás el Consejo para la Universalización de la Atención Primaria de Salud (APS) que tendrá la misión de acompañar el proceso para establecer la nueva política de Estado en que la APS pasará a convertirse en la principal estrategia de cuidado de salud para toda la población.

En lo específico, este organismo se encarga de asesorar a la Comisión Nacional para la Universalización de la Atención Primaria de Salud, presidido por la ministra de Salud, subsecretarios de Salud Pública y Redes Asistenciales. Está integrado por un Comité Sanitario de Alto Nivel, conformado por exministras y ministros de salud y un Comité Político-Social, que reúne a representantes del Poder Legislativo, la academia, trabajadoras y trabajadores de la Salud, y organizaciones de personas usuarias del sistema.

Consejero Coordinador

Como representante de la academia y tras una amplia trayectoria profesional en el sector público orientada a la Atención Primaria de Salud, el decano de la Facultad de Salud UST, Dr. Ricardo Fábrega, fue designado como Coordinador del Consejo, cuya función principal es la de entablar relaciones con el gabinete ministerial en esta materia.

“Que me hayan invitado a formar parte y a coordinar el Consejo significa una muestra de confianza y reconocimiento a mi trayectoria profesional en redes integradas de salud, basadas en APS, y es algo que valoro mucho”, expresó el Dr. Fábrega.

Entre las funciones del Consejo se encuentra acompañar al Gobierno en su proceso de universalización de la atención primaria, “ser veedores, opinarles, y hacerlo fundadamente. El Consejo funciona como una alerta para que las políticas públicas avancen conforme a lo esperado”, explicó el decano. Seguido de esto, el académico agregó que el proceso de universalización de la atención primaria toma entre 10 a 15 años, según la experiencia internacional, por lo tanto, el organismo recientemente conformado tiene la misión de “generar con estos actores un acuerdo de amplia base para unificar qué entendemos por universalización de la atención primaria en Chile, como un acuerdo de Estado independiente de los próximos gobiernos”, agregó.

En las funciones de coordinación del Consejo se destaca la articulación de todas y todos sus miembros; contribuir al diálogo incluyendo todas las posiciones; y establecer acuerdos con miras a la universalización de la atención primaria de salud. “A largo plazo, lo que se intentará es aunar voluntades para tener una propuesta compartida de cómo universalizar la APS”, explicó el Dr. Fábrega.

Una Facultad a tiempo con los cambios

La designación del decano como un actor activo del Consejo plantea una serie de oportunidades para la formación de los futuros profesionales de la Facultad de Salud UST, caracterizada por un sello comunitario con foco en APS y un acceso universal, junto con una especial vinculación con el territorio y las comunidades que viven en condiciones de vulnerabilidad.

“Este tipo de transformaciones de largo plazo y alcance en temas tan importantes, como es el fortalecimiento de la atención primaria en salud, está muy relacionada con la academia y con cómo formamos a nuestros estudiantes”, manifestó el académico.

El Dr. Fábrega se refiere a que “permite transmitir hacia el interior de la Universidad qué es lo que está pasando en el sector donde van a trabajar los futuros profesionales de la salud. Lo que vayamos decidiendo aquí (en el Consejo) va a ser política pública en los próximos 5 a 10 años y, por lo tanto, nos permite anticiparnos en las posibles modificaciones de nuestro currículum y a las necesidades de lo que va a requerir el sistema. La clave es que vayamos a tiempos con los cambios”, expresó.

A su vez, el Dr. Fábrega resaltó la importancia de que los equipos académicos esté en sintonía con las transformaciones en materia de salud pública. “Mi participación requiere también transmitir a los equipos académicos de la Facultad lo que está pasando en la Comisión, porque es un aprendizaje para nosotros cómo formadores de talentos humanos para esta política de Estado”, finalizó.