Conversatorio analiza el aumento de la violencia escolar en el retorno a las clases presenciales

Actividad organizada por la carrera de Psicología de UST Viña del Mar contó con la participación de especialistas que aportaron miradas desde la academia, la institucionalidad y la práctica.

¿Cómo analiza la academia el aumento de la violencia escolar en el retorno a las clases presenciales? ¿Cuál es la mirada de la institucionalidad? ¿Y qué opinan quienes están en el aula, trabajando con los estudiantes? En torno a esos tópicos giró el conversatorio “Violencia escolar: una mirada desde el retorno a la presencialidad”, organizado por la carrera de Psicología de Universidad Santo Tomás sede Viña del Mar.

En el encuentro expusieron Karina Sánchez, psicóloga educacional que ha sido parte de duplas psicosociales en equipos de convivencia escolar; la psicóloga Claudia Carrasco, doctora en Ciencias de la Educación con postdoctorado en Educación, directora del departamento de mediaciones y subjetividades UPLA; y Hugo Díaz, asistente social encargado de la Unidad de Comunicaciones y Denuncias de la Superintendencia de Educación Región de Valparaíso.

En primer término, Karina Sánchez se refirió especialmente a su labor en la escuela básica La Viña, de Cabildo. “Está en una zona rural, se podría decir que es como ‘una taza de leche’ a pesar de la cultura machista del sector”, dijo. Respecto a su trabajo, detalló que para prevenir la violencia escolar es preferible “promover una cultura del buen trato, que entregará resultados mucho más positivos”, apuntando también a la resolución pacífica de conflictos. En cuanto a los problemas surgidos en el retorno a las clases presenciales, indicó que no se puede señalar que la crisis sanitaria sea culpable de la explosión de la violencia, aunque sí se debe considerar como factores el aislamiento prolongado, el descenso en las interacciones sociales y sus consecuencias en la salud mental.

Esperanzas en la función social de la escuela

Por su parte, Claudia Carrasco vinculó el concepto de violencia escolar con la Psicología de la emergencia, apuntando a que las crisis generalmente afectan más a los grupos más vulnerables porque ven superada su capacidad de respuesta, que es lo que ha ocurrido tras la pandemia. “Después de una situación de desastre hay distintas fases de reacción. El regreso a clases es un intento de retomar la normalidad, pero hay que comprender que nunca se va a recuperar la cotidianidad previa a la crisis, lo que no significa que lo nuevo sea peor o mejor”, dijo.

El problema; según indicó, es que en esta etapa de duelo y desilusión se ha perdido el sentido de comunidad y la confianza en las instituciones. Por lo mismo, aumenta la violencia hacia quienes representan a las instituciones. “Ocurre que hoy todas las esperanzas de reconstrucción del tejido social se ponen en la escuela. La función social de la educación y la escuela están a prueba en estos momentos. El camino debe ser volver a construir comunidad”, postuló.

Finalmente, Hugo Díaz se refirió a las normativas que regulan la convivencia escolar. Destacó que la cultura escolar vive una aparente paradoja en la que se enfrentan lo formativo y lo punitivo. “El castigo parece ser parte de la cultura, en el sentido de que frente a un error se opta por castigar y sancionar, pero el desafío es avanzar desde lo punitivo a lo formativo, aunque acá asoman como dificultades la inmediatez y la tendencia a protocolizar todo, lo que nos impide generar ese cambio”, manifestó.