Exequiel Coñoman

Docente de Santo Tomás Talca a un paso del Global Teacher Prize Chile 2019

Galardón considerado mundialmente como el Nobel de los profesores, podría recaer en este educador diferencial que a diario trabaja por la inclusión y el acceso a mejores oportunidades de sus alumnos y familias en la comuna de San Javier.

Cambiar la vida de una persona y su familia, entregarles herramientas que los saquen de la pobreza, motivarlos para ser mejores cada día y con todo esto contribuir de alguna forma a generar un mundo mejor, son los objetivos por los que a diario trabaja el Educador Diferencial y docente de la carrera de Técnico en Educación Especial del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Talca, Exequiel Coñoman.

Sin embargo, conseguir lo anterior significan años de arduo trabajo, esfuerzos en el más amplio sentido de la palabra y una serie de experiencias que este profesor ha recorrido convirtiéndose no solo en un reconocido docente, sino que también en uno de los cinco finalistas del Global Teacher Prize Chile 2019 que próximamente será adjudicado y que ya le entrega un pasaje a la competencia mundial.

El Global Teacher Prize Chile es la versión nacional del Global Teacher Prize Internacional. Éste es un reconocimiento de la Varkey Foundation, que desde 2014 busca relevar la profesión docente y celebrar a los mejores profesores del mundo.

El premio –conocido mundialmente como “el premio Nobel de los profesores”– identifica a los maestros más innovadores y comprometidos que estén teniendo un impacto inspirador en sus estudiantes y en su comunidad.

Exequiel Coñoman es profesor de Educación Especial, Magíster en Educación Especial y Psicopedagogía y cuenta con diversos pos títulos. Su trayectoria profesional la ha desarrollado en escuelas especiales, principalmente en la Escuela Emma Sepúlveda de Lobos de la comuna de San Javier en la Región del Maule y hace seis años es académico de la carrera de Técnico en Educación Especial del CFT Santo Tomás Talca, siendo un claro exponente del foco estratégico institucional de Talentos Académicos para el Proyecto Educativo.

También ha sido un importante difusor de la cultura mapuche, ya que desde la educación se ha encargado de abogar por el respeto a la diversidad y de difundir esta cultura.

¿Cómo se vincula el trabajo en la Escuela Especial con la formación de futuros profesionales?

“He podido vincular mi trabajo en la escuela con las asignaturas de Necesidades Educativas Especiales Permanentes y Metodología de Trabajo I y II en Santo Tomás porque esas asignaturas tienen que ver directamente con los diagnósticos que tienen que ver con las discapacidades. Aparece mucho la discapacidad intelectual, visual, auditiva, trastornos del espectro autista o retos múltiples. Finalmente, lo que puedo enseñar en Santo Tomás es lo que hago en la escuela porque me relaciono con alumnos con todas estas discapacidades”.

¿De dónde nace su interés por la Educación Diferencial?

“Principalmente nace desde la enseñanza básica donde estuve en un ambiente bien vulnerable en una escuela municipal, la Escuela Villa La Paz de la cual me siento súper orgulloso. En ese tiempo era difícil seguir estudiando, la mayoría de mis compañeros ni siquiera iban al liceo. Por ahí parte mi vocación en el hecho de que vi realidades que a pesar de que mi situación económica no era muy aventajada, había gente que lo pasaba más mal que yo y quería cambiar esa realidad, pero no sabía cómo. En el liceo se reafirmó el hecho de que quería aportar a los grupos vulnerables y una profesora me dijo que existía la Educación Especial. Investigué y me calzó todo y me hizo mucho sentido. Mi primer año fue con puras mujeres y fue difícil, por ejemplo, yo tenía un súper bajo lenguaje y me costó al principio adaptarme al mundo de la universidad. Hoy creo que haber estado con mujeres estudiando me favoreció en muchos aspectos desde lo emocional, el lenguaje y me reencantó la carrera. No me veo en otras cosas”.

¿Hay que tener alguna aptitud excepcional o característica distintiva para dedicarse a la Educación Especial?

“Lo primordial es vocación, de hecho, creo que la mayor habilidad que tengo es la vocación luego el resto viene por añadidura porque te puedes perfeccionar y aprender a medida que vas teniendo experiencias. La mayor característica en la educación especial es que tienes que tener mucha vocación hacia las personas primordialmente por el trato hacia las personas con discapacidad en mi caso que es la mayor labor que he hecho. Hay que ser muy ordenado, sistemático, proactivo e innovador porque no hay muchos recursos y se deben buscar alternativas. Creo que se debe tener un poco de espíritu emprendedor, partir de cero, recomenzar, retomar, seguir adelante y eso”.

¿Cómo se traspasan todas esas experiencias a los futuros profesionales de esta área de la educación?

“Yo enfoco las asignaturas que dicto en el hecho de que cuando nos toca trabajar en educación especial lo curricular es una mínima parte porque si nos enfocáramos solo en lo curricular estaría sesgando una realidad mucho más amplia. Una de las formas que he podido trabajar para que mis alumnos se desempeñen a futuro de mejor manera es provocando la necesidad de que ellos entiendan esto, que hay también calidad de vida e inclusión. Les enseño con muchos ejemplos de trabajo real y me esfuerzo por motivarlos para que vengan a clases con interés. Un docente en cualquier área que se desempeñe tiene que ser muy humano y de esa forma se transmite el hecho de que uno ama lo que hace, si no eres capaz de transmitir eso difícilmente los otros querrán hacer lo mismo que tú. El conocimiento no es lo que busco dejar, sino más bien la forma, que vean la vida cotidiana de las personas con necesidades educativas especiales. Los profesores de educación especial tenemos que ser seres integrales, saber de muchas cosas y no solo de asignaturas sino también de la vida, desde instalar un cable hasta preparar alimentos. Todo lo que se aprende en esta vida en algún minuto te sirve”.

¿Qué es lo que usted más destaca hasta ahora de su carrera profesional?

“En cuanto a premios, el año pasado gané uno que se llama Enseña Sustentable que tenía que ver con prácticas innovadoras relacionadas a la educación, pero con sustentabilidad y recibí una pasantía en Nueva York donde pude aprender un poco más de prácticas innovadoras en educación. Ahora estoy nominado entre los cinco finalistas de Global Teacher Prize Chile. Sin embargo, el mayor logro que siento que he adquirido hasta el momento es ver el empoderamiento de personas con discapacidad, el sentir que están formados, que son más maduros, el ver a las familias participando activamente en el proceso de inclusión social y laboral de sus hijos, el haber logrado trabajo colaborativo con las familias. Hoy día tenemos una cooperativa de trabajo compuesta por los estudiantes y sus mamás específicamente en el sector agropecuario: crema de caracol, venta de huevos azules de gallinas kollanka y ketro. Eso es lo que más destaco, ver una comunidad mucho más accesible, más respetuosa”.

Innovación y más oportunidades

El principal proyecto impulsado por el profesor Exequiel Coñoman está al interior de la Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, donde varios años de trabajo se convirtieron actualmente en una cooperativa que ofrece una fuente laboral a los estudiantes, a los jóvenes ya egresados y también a sus familias.

¿En qué consiste el proyecto que lo hizo competir por el Global Teacher Prize Chile 2019?

“En el fondo lo que hice fue juntar muchas ideas que en otros lugares se hacen, pero de forma separada, en cierta medida innové en algunas cosas porque trabajo mucho la economía circular. Vi algunos desafíos porque el emprendedor siempre tiene que tener un desafío, me considero un emprendedor de la educación. Entonces tengo desafíos que son la baja calidad de vida de las personas con discapacidad, la baja inclusión socio-laboral, curricularmente hay muchas barreras, físicamente también, y por prejuicios sociales hay un montón de desafíos. Tenemos también por otro lado a las mamás donde tienen poco tiempo, la carga emocional y física y también el tema de los egresados que una vez que salen del colegio se quedan en la casa. Ahí empecé a visualizar alternativas, entonces tenemos por una parte inclusión en empresas en el plano dependiente en restaurantes, municipios, recepcionistas, bodegueros y muchos más, esta inclusión laboral tiene que ver con prácticas pagadas o también con contrato. Pero también debíamos darle cobertura a otro tipo de alumnos y ahí vinculé el tema del emprendimiento familiar sustentable. Tenemos un gallinero con gallinas mapuches que dan huevos azules, tenemos una lombricompostera donde las familias llevan sus restos orgánicos y tenemos lombrices californianas, tenemos un huerto, tenemos un criadero gigante de caracoles con jaulas y otros libres con lo cual elaboramos cremas. Además, con todo esto yo trabajo el currículum con mis alumnos, con esto puedo enseñar bilogía, ciencias, matemáticas o lenguaje porque el caracol pone entre 50 y 150 huevos, entonces ya estoy pasando ciencias. Pesamos antes de ir a dejar el alimento, trabajamos guías sobre las razas Ketro y Kollanka de las gallinas entonces se amplía el lenguaje y todo lo demás. Y también la calidad de vida que es el bienestar físico, emocional y material porque van a tener recursos”.

¿Cuántos alumnos se benefician con esto?

“Tengo un curso de 10 alumnos porque por ley no pueden ser cursos de más de 15 alumnos en educación especial más 7 apoderadas que están dentro de la cooperativa. Pero el beneficio es para toda la escuela porque todos pueden pasar por este ciclo. Ellos pueden permanecer en el colegio máximo hasta los 26 años y ahí es donde damos coberturas a los egresados porque esta cooperativa los va a ir trayendo, a veces ellos tienen trabajos formales pero no hay inclusión social, es decir, no se irán a tomar un café con sus compañeros después del trabajo entonces a ellos los traigo una o dos veces por semana a trabajar a la cooperativa y así obtienen también relación social”,

¿Los productos que elaboran se comercializan?

“Claro que sí, los huevos los estamos empezando a comercializar porque estábamos en la etapa de la reproducción, tenemos una incubadora y hemos logrado vincularnos con hartos empresarios locales y las cremas también”.

Con todo el trabajo que realiza y los logros alcanzados ¿Qué es para usted la inclusión?

“Inclusión para mí tiene que ver incluso con entregar las mismas oportunidades que al resto, entonces si los demás tienen derecho a tener educación de calidad en una escuela regular en un liceo técnico profesional, las personas que están en escuelas especiales hoy día también tienen que tener las mismas oportunidades de educación de calidad. Y cómo se logra, dando cobertura a los desafíos que tenga esa población. Entonces la inclusión va mucho más allá de que me incluyan en un grupo, tiene que ver con las oportunidades en todo ámbito. Siento que he aportado a la inclusión y creo ser merecedor del reconocimiento que estoy teniendo porque he aportado también a que la sociedad hoy día tenga una mirada distinta”.

¿Qué mensaje podría dar a la comunidad en general sobre estos temas?

“Creo que hay todavía muchos prejuicios, aunque se han derribado hartos y hay avances legislativos que han facilitado la contratación por ejemplo de personas con discapacidad, pero sigue habiendo algunos sesgos. Creo que los empresarios y la comunidad en general no deberían estar enfocados en solo responder a un fin de una ley, en el fondo el llamado es a conocer a las personas con discapacidad, a saber que necesitan tener las mismas oportunidades y son muy capaces. Cuando hay inserción de personas con discapacidad dentro de las empresas generan un mejor ambiente laboral porque son alegres. Hay que entender que las empresas no hacen un favor al contratarlos porque las personas con discapacidad van a ser productivos y serán un aporte importante desde lo productivo y desde la emocionalidad. Hay avances, pero estamos en deuda todavía con las personas con discapacidad en posibilitar una mejor calidad de vida, ya que la inclusión laboral no es suficiente. Restringirlo a eso es reducir una problemática que es mucho mayor, entonces creo que esa visión que tengo de la educación especial es lo que me hace innovar para abarcar todas las problemáticas”.

san javier

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

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exequiel coñoman

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.

Escuela Emma Sepúlveda de Lobos, San Javier, Región del Maule.