IP Santo Tomás se presenta a un nuevo proceso de acreditación con el propósito de relevar las fortalezas de su Proyecto Educativo

Durante 2020, la institución buscará exhibir los significativos avances que ha alcanzado en el último tiempo, a fin de continuar asegurando la calidad de la formación que imparte a sus más de 24 mil estudiantes a nivel nacional.

Con el propósito de evidenciar sus fortalezas y oportunidades de mejora, el Instituto Profesional Santo Tomás se ha presentado a un nuevo proceso de acreditación institucional ante la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), encontrándose hoy a la espera de la visita del comité de pares evaluadores externos.

En el contexto de la pandemia por COVID-19, la CNA ha indicado que “en lo que respecta a las instituciones de Educación Superior con procesos de acreditación en curso o por iniciarse, se dará un especial énfasis a la flexibilidad de las decisiones y plazos aplicables en las distintas fases de dichos procesos”.

No obstante, en el mes de mayo, el IP Santo Tomás entregó su Informe de Evaluación Institucional (IEI) a la CNA, en el cual expone los avances más relevantes respecto de su anterior proceso de acreditación, realizado en 2017, así como todo el trabajo que desarrolla la institución para dar cumplimiento a su Misión.

Perfil Institucional del IPST

“Como parte de nuestra Misión por contribuir al desarrollo del país, en el Instituto Profesional Santo Tomás nos hemos orientado hacia la formación de técnicos y profesionales integrales, que sean reconocidos por contar con una sólida formación intelectual, moral y personal. Es así como, en el IP Santo Tomás, el centro de nuestro quehacer es el estudiante”. Con estas palabras, el Rector Nacional del IP Santo Tomás, Juan Pablo Guzmán, explica el principal propósito de la institución, que desde 1987 ha seguido un largo camino hacia su consolidación dentro del sistema de educación superior chileno.

Con una importante presencia nacional, gracias a sus 20 sedes de Arica a Punta Arenas, y una oferta académica de 39 carreras profesionales y técnicas, cuenta hoy con una matrícula de 24.926 alumnos, posicionándose como el cuarto instituto profesional con más estudiantes del sistema. A ello, se suman sus 35.082 titulados, que cada día realizan un aporte concreto al desarrollo de sus comunidades y del país.

Por otra parte, la madurez del IPST se ve refrendada, también, por su activa participación en el diseño de políticas públicas del subsector de Educación Superior Técnico Profesional (ESTP), a través de la presidencia del Consejo de Rectores de Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica Acreditados (Vertebral), y su colaboración con el Ministerio de Educación (Mineduc) en la elaboración de la Estrategia Nacional de Formación Técnico Profesional.

Asimismo, ha participado en la implementación del Piloto Marco de Cualificaciones Técnico Profesionales y en el Comité de Acceso Técnico-Profesional convocado por el Mineduc para definir el sistema de acceso aplicable al sector en el proceso de admisión 2021, al que el IPST adscribirá. Cabe destacar que el IPST también colabora en el Programa IPCFT 2030, iniciativa conjunta entre la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) y el Mineduc.

Proyecto Educativo

Por otra parte, en preciso enfatizar que el Proyecto Educativo del IPST se fundamenta en tres principios de aprendizaje: uno constructivista, entendiendo que el conocimiento es construido por el propio individuo; el aprendizaje experiencial, en donde las personas aprenden a partir de sus propias experiencias y de la reflexión que hacen sobre sus propias conductas, y existe también el concepto tomista de la educación, a través del cual los estudiantes adquieren hábitos que lo perfeccionan en lo intelectual, en lo práctico-técnico y en lo moral.

De esta manera, el Proyecto Educativo institucional se articula en torno a siete ejes, bajo los cuales “el IPST entiende su rol formativo, fuertemente vinculado a la realidad socioeconómica y laboral de Chile y sus regiones, atendiendo tanto a los requerimientos de capital humano como a la movilidad y desarrollo social de sus egresados”, sostiene Juan Pablo Guzmán. Estos ejes son: formación basada en competencias; desarrollo de oferta educativa y formatos; sistema articulado; estudiante como centro del proceso de aprendizaje; desarrollo de competencias de especialidad, empleabilidad y sello valórico; educación continua y formación de los egresados, y gestión por indicadores de resultados del proceso formativo.