Pulgas y garrapatas: La pesadilla de nuestras mascotas cuando comienza el calor

Aunque para muchos el comienzo de la primavera y el aumento de las temperaturas son sinónimos de alegría y panoramas, para quienes tienen mascotas esta época significa estar más atentos a la aparición de pulgas y garrapatas.

Según explica la académica dela Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Santo Tomás, María Soledad Hinojosa, si bien esta posibilidad está presente durante todo el año, cuando aumenta la temperatura hay mayor eclosión de huevos y larvas del parásito, por lo tanto la infestación es mayor en el ambiente y en nuestras mascotas.

“Son los perros quienes se ven más afectados por la presencia de garrapatas, aunque esto no quiere decir que eventualmente, y en menor frecuencia, sí se puedan encontrar parásitos en gatos. Por otro lado, no hay que olvidar a las pulgas, ya que éstas pueden afectar a perros, gatos y también a seres humanos”, advierte María Soledad Hinojosa.

Tanto pulgas y garrapatas pueden transmitir una serie de enfermedades a las mascotas y a los humanos, pero no hay que alarmarse, ya que el contagio es totalmente evitable. “Es recomendable realizar controles de ectoparásitos frecuentes con productos adecuados, además de recurrir al médico veterinario para que evalúe al paciente: la raza, la edad, el peso, el ambiente donde se desenvuelve, la cantidad de mascotas con las que convive, el lugar donde vive, por ejemplo si es en una casa, departamento o parcela, entre otros. Todos estos datos son relevantes para el uso de algún producto antiparasitario, y es el médico veterinario la persona capacitada de dar la mejor orientación del producto, el tiempo y la frecuencia de administración según época del año”, comenta la especialista.

¿Cómo sé si mi mascota ya tiene pulgas y garrapatas?

Además de los controles médicos y el uso de productos antiparasitarios, lo recomendable es revisar cada cierto tiempo a las mascotas y estar atentos a cambios en su conducta. Por ejemplo, en el caso de las pulgas, los perros y gatos comenzarán a rascarse más que antes, y en el caso de las garrapatas, al momento de jugar o acariciar a nuestro perro podremos sentirlas sin dificultad. “Una buena opción es separar el pelo y mirar hacia la piel para estar seguros, pero no retirar los parásitos manualmente, ya que pueden dejar una lesión dolorosa e incluso sangrante que se puede infectar”, previene María Soledad Hinojosa.