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Egresados de jornada vespertina son reconocidos con el “Premio Santo Tomás” en ceremonias de titulación en sede Viña del MarLa feliz coincidencia de dos hermanos que recibieron su título el mismo día en Santo Tomás Viña del Mar
Giordana Sandoval obtuvo su diploma de Técnico en Educación Parvularia y su hermano Jonathan se tituló en la carrera de Técnico en Mantenimiento Industrial.
Son hermanos, estudiaron al mismo tiempo en Santo Tomás, pero nunca se toparon en salas, pasillos o jardines de la institución. Sin embargo, el destino les tenía preparada una agradable sorpresa a ellos y su familia: se titularon el mismo día. Así se puede resumir la historia de Giordana Sandoval Garrido y su hermano Jonathan, que en las recientes ceremonias de titulación de Santo Tomás Viña del Mar recibieron sus diplomas de Técnico en Educación Parvularia y Técnico en Mantenimiento Industrial, respectivamente.
Jonathan fue el primero en ingresar a Santo Tomás y recuerda que “llevaba 10 años sin estudiar nada, quise desarrollarme personalmente así que fui a Santo Tomás, vi una carrera que me gustó, la elegí y traté de llegar hasta el final”. Un año después, su hermana Giordana ingresó a Técnico en Educación Parvularia: “yo estudiaba Psicopedagogía en otra institución que perdió la acreditación, entonces tuve que buscar una alternativa. No encontré Psicopedagogía en jornada vespertina, que era lo que yo necesitaba porque también trabajaba, así que me decidí por Técnico en Educación Parvularia, que es una carrera más corta y donde la malla y los horarios me permitían trabajar y estudiar”.
A pesar de estudiar casi en forma simultánea, los hermanos Sandoval Garrido confiesan que jamás pensaron que se titularían el mismo día. “Lo que pasa es que se suponía que él tenía que titularse primero que yo”, acusa Giordana entre risas. “Es que tuve un semestre sabático”, se defiende Jonathan.
“Cuando fui a dar mi examen de grado de Técnico en Mantenimiento Industrial me dijeron que esta sería la fecha de titulación. Ahí vimos que íbamos a coincidir”, agrega. Su hermana dice que “esa noticia fue una alegría doble para la familia, sobre todo para mi mamá, que es el pilar fundamental de nosotros”.
Ambos cuentan que durante los años de estudio nunca coincidieron en Santo Tomás. Giordana tenía la mayoría de sus clases en la sede Limonares, mientras Jonathan lo hacía en Uno Norte. Además, ella estudiaba en jornada diurna y él en horario vespertino. “En el único lugar que coincidíamos era en la casa, haciendo trabajos. Yo hacía más que ella, eso sí”, contraataca Jonathan y esta vez su hermana es quien se defiende: “lo mío era hacer más manualidades y leer. Pero no, no había una carrera más difícil que la otra, son áreas distintas, nada más”.