Control motor y envejecimiento
Para referirnos a control motor lo haremos desde lo simple a lo complejo. El movimiento es el desplazamiento mecánico de alguna o todas sus partes componentes, se entiende como movimiento a los tropismos de las plantas, e incluso al desplazamiento de distintas estructuras a lo largo del citoplasma.
En muchas enfermedades se altera o pierde el movimiento como, por ejemplo, síndromes hipocinéticos, enfermedad de parkinson, balismo, atetosis, síndrome de piernas inquietas, entre otras, y la mayoría asociada al adulto mayor. Sin movimiento los seres humanos prácticamente no tenemos vida o se nos complicaría mucho a tal extremo de no poder subsistir.
Para alimentarnos llevamos la comida a la boca mediante un acto motor controlado por el cerebro, el acto de la deglución que muchas veces esta alterado también está comandado por el cerebro. Para desplazarnos, caminar, correr, o saltar lo hacemos gracias al movimiento controlado por el cerebro. Si perdemos todo lo anterior, vemos que nuestra calidad de vida se ve alterada.
Cuando envejecemos los movimientos se hacen más lentos y cada vez a medida que pasan los años perdemos la capacidad de movernos hasta llegar a dar pequeños pasos e incluso, en la tercera edad es frecuente encontrar adultos mayores postrados.
Es por eso que es importante destacar lo que es el control motor. Todo está regulado por ello, donde el cerebro es la estructura y se encuentran los comandos que dirigen al cuerpo y dan las características del movimiento, siendo esto tan importante para la vida misma. Actualmente, hay muchas investigaciones y estudios que nos informan y actualizan sobre como abordar enfermedades relacionadas con la perdida de movimiento, y que apuntan a dar mas y mejores respuestas a estos procesos.
Es relevante que siempre estemos en movimiento, que los adultos mayores realicen ejercicio, y que podamos estar informados para cuidar nuestra etapa de envejecimiento, ya que el ciclo de la vida nos lleva hacia allá.