Terapia Ocupacional UST Santiago realizó emotiva Ceremonia de Investidura

“Es una etapa difícil, pero llegar al Campo Clínico es enriquecedor. Ha sido maravilloso estar con los usuarios”, afirmó Rocío González, estudiante de Terapia Ocupacional de la Universidad Santo Tomás Santiago, tras la Ceremonia de Investidura que organizó su carrera, en la cual participaron autoridades, docentes y familiares.

Para Carolina Leiva, Directora de Carrera de Terapia Ocupacional UST Santiago, “fue una ceremonia muy emotiva, pensando en que tuvimos la posibilidad de reencontrarnos con nuestros estudiantes en este acto simbólico, después de dos años en que no pudimos estar en la presencialidad, y acompañarlos en este camino de inicio de internado profesional, que es muy significativo para nuestra escuela”.

“Para ellos significa el inicio de una etapa muy importante, en que salen del aula para trabajar en centros de práctica, donde ellos se transforman en un recurso humano competente, desde lo disciplinario, que atiende a pacientes en hospitales, a personas mayores en residencias, a niños y adolescentes en colegios, entre otros. Por lo tanto, significa poner en práctica todas sus competencias desarrolladas a lo largo de su carrera y demostrar la calidad profesional y humana que tienen, que han adquirido en nuestra universidad, demostrando el Sello Tomasino”, agregó.

Por su parte, Isidora De la Lastra, estudiante investida de Terapia Ocupacional, aseguró que “todo salió hermoso. Es el momento de aplicar todo la aprendido, toda la teoría. Eso es lo rico, porque uno va viendo que se ven frutos hermosos en la práctica. Muy orgullosa de mi carrera y cada vez más feliz de haberla elegido”.

“Tratar con pacientes tiene una carga emocional y de humanidad gigante. Ése es el factor común en las carreras de la salud, tratar con personas y que, por ende, interactuamos desde otro lugar, desde la empatía con personas dolientes”.

Su compañero Roberto Martínez fue en la misma línea, asegurando que “fue bien bonito e íntimo. Se agradece que nos pudieran acompañar familiares. Aquí llegamos con el objetivo de ayudar a la gente. Nuestro pilar o sello es poder ayudar a las personas”.

Finalmente, Rocío González alabó el hecho de haber podido estar “junto a nuestros seres queridos, porque uno finaliza una etapa como estudiante teórico y pasa a la práctica para ejercer en el Campo Clínico, donde seguimos aprendiendo. Me emociona que estén mis padres aquí. Me emociona muchísimo que me vean crecer en mi formación profesional como futura Terapeuta Ocupacional”.

La emotiva jornada se llevó a cabo en la Iglesia San Lázaro de Santiago, respetando todos los protocolos sanitarios, la cual contó con palabras del Padre José García Patiño, Capellán Nacional Santo Tomás.