• Recientemente la revista Andes Pediátrica publicó los resultados del estudio realizado por científicos chilenos, entre ellos dos académicos de la Escuela de Kinesiología de la UST Los Ángeles.

El objetivo de la investigación fue analizar si el tiempo de exposición ante pantallas de televisión, computadores o celulares, se relaciona con un menor rendimiento académico en escolares de segundo ciclo, determinando además diferencias por sexo.

La investigación se efectuó sobre la base del estudio denominado “Encuesta de salud y rendimiento escolar de la provincia del Biobío 2018”, y estuvo aplicado a más de 700 escolares entre quinto y octavo básico de establecimientos educacionales públicos de una comuna de la provincia del Biobío

El rendimiento escolar fue medido con las calificaciones en las asignaturas de lenguaje, matemáticas, educación física, promedio general y a través de conductas asociadas a la cognición en el contexto escolar.

Entre las conclusiones los expertos señalan que el uso excesivo de pantallas se asocia negativamente con el rendimiento académico, entendido este como un concepto que describe el éxito de los estudiantes en la escuela.

Por tanto, el rendimiento depende de factores como las habilidades cognitivas y actitudinales, comportamientos y logros académicos, los cuales a su vez se miden mediante calificaciones, participación en tareas y asistencia a clases. Todos estos aspectos se ven alterados.

Los resultados muestran que los escolares que participaron del estudio pasan entre cinco y seis horas en promedio frente a una pantalla, todos los días. Los niños pasan más tiempo jugando videojuegos y las niñas más navegando por internet.

Además, los escolares que pasan mayor cantidad de horas frente a una pantalla, principalmente jugando videojuegos y navegando por internet presentaron notas más bajas en matemáticas, lenguaje, educación física, promedio general y se perciben con menos memoria, más lentos para resolver problemas matemáticos, con más dificultades para mantener la atención en clases o para resolver tareas complejas.

ALGUNOS DATOS DE CONTEXTO
El grupo de investigadores concordó en que es necesario abordar preventivamente, en la infancia y adolescencia temprana, la relación que tiene el uso y sobreuso de la tecnología con el rendimiento académico.

Se observó que las niñas tienen mejor rendimiento escolar, aunque presentaron una autopercepción más baja de sus conductas relacionadas a la cognición.  Del mismo modo, se evidenció que quienes presentaban los promedios generales más bajos fueron los hombres que pasaban más tiempo diario frente a una pantalla.

  • El 75% de los jóvenes posee al me nos un dispositivo de pantalla en su dormitorio.
  • Estudios señalan que el 83,1% de los escolares pasan más tiempo del recomendable para su edad frente a una pantalla.
  • Los mecanismos por los cuales las pantallas afectan el sueño son el desplazamiento de la hora de dormir, la estimulación psicológica del contenido mediático y el efecto de la luz emitida por las pantallas.
  • Se ha demostrado que, en niños y niñas, la emisión de luz suprime la secreción de melatonina el doble que en los adultos alterando el ciclo sueño/vigilia, lo que se manifiesta en diversos ámbitos físicos, emocionales, psicomotores y neurocognitivos, académicos.

El equipo de este trabajo está conformado por Rafael Zapata Lamana, académico de la Escuela de Educación Universidad de Concepción sede Los Ángeles; Jessica Ibarra Mora, investigadora del Departamento de Educación Física, Deporte y recreación de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación; Sonia Sepúlveda Martin y Laura Martínez González, del Departamento de Ciencias Clínicas y Preclínicas de la Facultad de Medicina de la UCSC.

También son parte de esta comunidad académica Mario Henriquez Beltrán e Igor Cigarroa Cuevas, investigadores de la Escuela de Kinesiología de la Universidad Santo Tomás sede Los Ángeles.