PF Alimentos compartió con los alumnos de Ingeniería Comercial de la UST Talca su experiencia en inclusión laboral

La empresa con presencia nacional realiza diversas acciones en esta línea a lo largo del país, contando con más de tres mil trabajadores.

El día miércoles 31 de agosto, la carrera de Ingeniería Comercial y el Plan de Continuidad de Estudios de la Universidad Santo Tomás Talca, realizaron la charla “Buenas Prácticas en materia de Inclusión Laboral: Caso PF Alimentos”, orientada a las y los alumnos que, a su vez, responde al foco estratégico institucional de Experiencia Transformadora del Estudiante.

En la ocasión, estuvo presente el director de carrera, Víctor Nocetti; el jefe de carrera, Nicolás Márquez; el jefe de carrera del Plan de Continuidad de Estudios, Germán Rojas; el director de administración y operaciones, José de Diego; y la directora académica de la UST, Ana María Orellana.

La charla, en tanto, tuvo como invitados a Paula Muñoz, Encargada de Gestión Social y Relaciones Laborales de PF Alimentos; y a Juan Carlos Carreño, Gerente de Personas de PF Alimentos.

Respecto al mensaje que entregaron en esta actividad, Paula Muñoz dijo que lo que esperaban poder transmitir a las demás empresas y a la comunidad era el hecho de que “la inclusión no debe ser inclusión por sí misma”.

“Debemos sentar las bases para tener una cultura laboral inclusiva, es decir, que las personas no sean incluidas en una empresa por una ley. No porque una ley mandata que haya un 1% de personas con discapacidad trabajando, las empresas deben hacer solo eso. Primero lo debemos hacer por convicción, las personas se deben sentir a gusto y deben ser parte de nuestro ADN. La cultura se construye a través de las creencias, de las prácticas, es una co construcción diaria, por lo tanto, lo que queremos transmitir a los demás es que las prácticas que a nosotros nos han dado resultados, deben ser constantes y mantenidas en el tiempo”, explicó.

A lo anterior, agregó que dentro de las prácticas que han detectado como empresa, si bien no tienen una política formal de inclusión, fue buscar dentro de la empresa a las personas para cubrir ese 1% que exigía la ley.

“Encontramos a estas personas dentro, no tuvimos que traerlas de fuera, no fueron desconocidos. Eran las personas que nosotros veíamos cotidianamente y que por miedo – porque nuestra sociedad es castigadora con las personas con discapacidad – no decían que tenían una discapacidad. Entonces les dimos la confianza, el espacio y el acompañamiento para que ellos se acreditaran. Una vez que lo hicieron fueron reubicados si es que lo necesitaban y de ahí en adelante todos saben que si tienen una discapacidad pueden levantar la mano y tomaremos las medidas para apoyarlos”, indicó.

En relación a cómo los demás trabajadores tomaron el hecho de que la empresa diera estas facilidades a las personas con discapacidad, Muñoz aseguró que en general la reacción ha sido positiva, aunque reconoce que en ocasiones han debido decir a ciertos postulantes debido a que una determinada planta no cuenta con la tecnología o la infraestructura para que pueda trabajar en ella.

Haciendo un diagnóstico del tema de inclusión laboral en Chile, la encargada de Gestión Social y Relaciones Laborales señaló que PF Alimentos participa de la Red de Empresas Inclusivas de la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA) junto a otras 70 empresas que piensan de manera similar sobre el tema.

“Queremos que la inclusión sea parte de nuestra cultura, por lo que todos remamos hacia las buenas prácticas como las comunicaciones inclusivas, los procesos de reclutamiento y selección inclusivos, pero también tenemos empresas que no lo ven así y prefieren hacer una donación a algún organismo”, señaló.

Por su parte, el Gerente de Personas, Juan Carlos Carreño, puntualizó que el tema inclusión era un desafío para la empresa, aun cuando en términos prácticos han recibido ciertos reconocimientos por el trabajo que han realizado en pos de la inclusión.

“A pesar de todo nosotros no nos declaramos empresa inclusiva, nos declaramos como una empresa que va en camino a la inclusión, entendiendo que esta es una transformación cultura y, por lo tanto, hemos centrado nuestro trabajo en desarrollar esa cultura, en instalar las bases de una cultura que nos permita ya no tener que decirle a la gente que debe ser inclusiva, sino que sea un proceso normal y natural”.

Finalmente, sobre el desafío que tienen las Universidades en este ámbito, Carreño dijo que actualmente las casas de estudios superiores desarrollan las competencias de las personas y aunque eso es muy relevante en el mundo laboral, también se debe atender la forma en que esa persona se inserta en el mundo del trabajo.

“Hoy se habla que la discapacidad no tiene que ver con la persona sino con las condiciones que rodean a esa persona y esas condiciones las podemos mejorar y en eso las universidades pueden acercarse a las empresas o instituciones con el fin de facilitar en algunos puestos de trabajo la inserción de los discapacitados, las adecuaciones necesarias que son importantes para que puedan realizar su labor”, concluyó.