Tenencia Responsable de Mascotas

Lo que actualmente se sabe y entiende sobre Tenencia Responsable de Mascotas (TRM) es que los sostenedores o propietarios de aquella mascota deben velar y asegurar que se cumplan ciertas condiciones como son dar abrigo, alimento, resguardo del clima (lluvia, sol, frío), salud y cariño. Esto significa que no solo debe asegurarse que esa mascota se encuentre en condiciones óptimas de salud, sino que se cumpla con los calendarios sanitarios (vacunas obligatorias por Ley, más las que corresponden por especie y las desparasitaciones internas y externas), entre otras condiciones.

Cada día se ve en las noticias o en redes sociales, como se intenta ayudar a animales abandonados y/o maltratados, ya sea para mejorarlos en su estado sanitario como también para la búsqueda de un hogar que quiera ser responsable con todas las implicancias que esto consigna y es aquí donde existen diferencias culturales que se pueden evidenciar en nuestro propio territorio, ya que es diferente cómo se entiende el cuidado de un perro en el campo o parcela o en la ciudad, por dueños instruidos en el tema y por dueños que no saben qué significa la TRM. Es por ello, que son destacables las iniciativas de las Ilustres Municipalidades de Providencia y Arica, las que han comenzado a normar la TRM para hacer entender a los dueños de ellas que no se trata solo que tenerle aprecio a una mascota por la función que desempeñan (trabajo, compañía), es obligatorio cumplir con todas las necesidades básicas para la especie, además de las indicadas anteriormente, incluidas el ejercicio con sujeción en la calle (no deben dejar salir solas a las mascotas, ya que pueden sufrir agresiones por terceros, atropellos o morder a alguien u otro animal),  identificación por microchip y esterilización/castración de las mismas.

Se ha entendido por parte de las autoridades que ellos son los encargados de llamar a sensibilizar y obligar, por medio de normas y/o leyes, aplicar castigos en los casos de maltrato animal como serían no dar de comer, no pasear y no dar atención médico veterinaria oportuna, entre otras.

Por lo que se entiende y esto es lo que debe asumir la población: si Ud. no es capaz de brindar todos estos requerimientos quizás sea el minuto que Ud. no adopte una mascota en el futuro y si Ud. actualmente tiene una y no puede cumplir alguna de ellas lo invitamos a reflexionar y acercarse a cada municipalidad para ver qué apoyos existen para cumplir con la TRM. Es muy importante decir que acá no solo valen las ganas de tener una mascota, lo que importa es el compromiso que se adquiere con ellas y como médico veterinario puedo decir que en la práctica clínica habitual vemos como personas muy humildes son capaces de brindar con gran cariño y dedicación cuidados adecuados, por lo que sabemos que querer es poder.