Sabemos que el tabaco es dañino; que cada cigarro contiene sustancias tóxicas responsables del riesgo de padecer cáncer de pulmón, boca, laringe, esófago y otros órganos; que disminuyen los sentidos del olfato y el gusto, que ocasiona problemas en la salud de encías y dientes, que mancha los dedos y que deja un mal aliento. Pero, ¿cómo influye el tabaco en la salud menstrual?

En 2002 se hizo público el estudio “Women and smoking: a report of the Surgeon General” que relacionó el consumo de tabaco con una regla más irregular, dado que el consumo frecuente de tabaco puede disminuir la producción de estrógenos.

Pero la irregularidad del periodo menstrual no es todo; existe una relación entre el consumo de cigarrillos con la dismenorrea, que es el dolor uterino presente en el inicio de la menstruación.

A esto se suma el conocido impacto negativo del cigarro en los bebés en gestación, ya que el tabaco puede afectar el crecimiento del feto, el desarrollo de sus órganos y el tiempo de gestación, ya que la fecha de parto podría adelantarse.

A esto podemos sumar los problemas de suelo pélvico presente en mujeres fumadoras, puesto que el consumo de tabaco puede afectar la salud pulmonar, ocasionando tos crónica, que al ser recurrente genera presión sobre la musculatura del suelo pélvico, provocando se debilite y generen problemas como la incontinencia.

Por esto, y por todo lo que ya sabemos del consumo de cigarrillos, es que este 31 de mayo, día mundial sin tabaco, te invitamos a reflexionar y plantear la disminución y/o eliminación de este vicio tan nocivo.