Premios Enoturismo Chile 2023: Maridando nuestro patrimonio

Las sorprendentes viñas y experiencias enoturísticas de Chile son destacadas con importantes premios internacionales. Año a año nuestras viñas, bodegas y experiencias son reconocidas en publicaciones y rankings internacionales.

Los Premios Enoturismo Chile son una iniciativa del Programa Enoturismo Chile de Corfo que busca dar a conocer y relevar las acciones y actividades de la oferta enoturística existente y emergente en los valles vitivinícolas de Chile, incentivando la innovación y buenas prácticas en sus recorridos, equipos de trabajo, instalaciones, oferta al público y otros aspectos decisivos en la experiencia del visitante.

En su segunda versión, los premios recibieron más de 70 postulaciones provenientes de las diferentes valles y regiones del país. De éstas, 33 empresas vinculadas al enoturismo y el turismo del vino fueron elegidas semifinalistas, después de un arduo proceso de evaluación técnica y presencial por parte de los comités de jurados regionales, integrados por representantes de instituciones públicas, privadas, gremios, academia y medios de comunicación.

Entre los nominados, se encuentran viñas y empresas vinculadas al turismo, alojamientos, gastronomía y la cultura de distintas regiones del país. Lo mejor es que, entre quienes voten, se sortearán en el mes de noviembre experiencias enoturísticas en destacadas viñas a nivel nacional y canastas con productos representativos de los valles vitivinícolas de Chile, como, por ejemplo: botellas de vinos, accesorios, copas, productos artesanales representativos, entre otros.

Este año el proceso ha incorporado diversas mejoras para el proceso de evaluación y votación del público, para este último se cuenta con una renovada web y un sistema de votación mucho más dinámico y ágil que permitirá con su número de Rut o Pasaporte a chilenos y extranjeros elegir a sus tres empresas favoritas por categoría en dos simples pasos.

Desafíos

Por mi parte, he terminado un nuevo año de evaluaciones como jurado de los premios enoturismo Chile, contemplando una industria que crece en hospitalidad, en pertinencia territorial y en tecnificación. Qué grato es ver cómo la propuestas de las viñas a lo largo de nuestro territorio nacional hoy están cada vez más apegadas y orientadas a la puesta en valor de lo chileno. Creo que aún falta camino por andar, que la experiencia debe tributar aún más a nuestro patrimonio cultural, debe ser más íntima y asociada a las regiones y representar con orgullo la biodiversa despensa agroalimentaria que nos caracteriza como territorio.

Es necesario que la oferta gastronómica tome la iniciativa de forma más contundente y haga suyos los valores que se asocian a nuestra culinaria, incluyendo en esta experiencia a los agentes de cambio de los paisajes cercanos (agricultores, recolectores, pescadores, artesanos, cocineros y cocineras). Es necesario condimentar de manera tradicional y dar personalidad marcadamente nacional a nuestra oferta y además maridarla con relatos significativos. Debemos profesionalizar cada vez con más fuerza los salones y proyectar un enoturismo pertinente a lo que somos.

Sin embargo, es lindo ver que vamos en la dirección correcta. Gracias a todas las viñas que están dando su mejor esfuerzo por representar nuestros valores; estoy muy agradecido de evidenciar su enorme cariño y hospitalidad, de ver a una industria más alineada y más orgullosa de Chile. Espero que los ganadores en cada una de las regiones sean los mejores embajadores de nuestra cultura, pues de nuestro vino ya lo son.