Informe INE Empleo Regional trimestre móvil noviembre 2022 – enero 2023

En relación al último informe INE Antofagasta sobre empleo, en el trimestre móvil noviembre 2022 – enero 2023, nos encontramos con una disminución de 0,1% de la tasa de desocupación regional, respecto a igual período del año anterior, alcanzando una cifra de 8,4% (la tasa de desocupación regional es el número de personas desocupadas y que ascendió en el trimestre señalado a 30.426 personas, expresado como porcentaje de la fuerza de trabajo regional, que en el trimestre corresponde a 361.277 personas, donde la fuerza de trabajo son personas en edad de trabajar, de 15 años y más según legislación laboral vigente, que durante la semana de referencia cumplen los requisitos para ser incluidas en la categoría de ocupados o desocupados).

Esta tendencia positiva se podrá acrecentar con el pasar de los trimestres debido a una interesante cartera de inversiones que tiene previsto el sector minero para el presente 2023. Esas inversiones de todas maneras podrán incrementar el encadenamiento productivo a diversas empresas prestadoras de servicios, fortaleciendo el clúster minero.

En relación a la subutilización de la fuerza de trabajo, que está referida a la inadecuación entre la oferta y la demanda, lo que se traduce en situaciones de necesidad insatisfecha de trabajo a cambio de remuneración o beneficios en la población; en específico la tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial en el trimestre en comento nos arroja que la fuerza de trabajo potencial, comúnmente conocida como personas fuera de la fuerza de trabajo (inactivas) que buscaron empleo, pero no estarían disponibles para trabajar; o que no buscaron, pero estarían disponibles. Conocidos también como inactivos potencialmente activos, aumentaron un 22,8% en doce meses, incidido por el aumento en las mujeres (29,6%), mientras que los hombres presentaron una variación positiva (12,4%). Estas cifras nos muestran que las personas inactivas están pendientes y activas para obtener alternativas de empleo. Situación que se estima se mantendrá en el corto y mediano plazo.

A su vez, la tasa combinada de desocupación y fuerza de trabajo potencial (SU3), indicador que se utiliza para caracterizar a las personas que mantienen algún tipo de vínculo con el mercado laboral, ya sea porque buscan activamente trabajar o porque están disponibles pronto para hacerlo, se estimó, en el trimestre móvil noviembre 2022 – enero 2023, en 16,5%, creciendo 1,3 puntos porcentuales. Según sexo, para los hombres el indicador se situó en 13,3% bajando en 0,9 pp, y en las mujeres fue de 20,9%, ascendiendo 4,3 pp. La brecha de género alcanzó 7,6 pp. en desmedro de las mujeres. Estas cifras muestran este indicador y buscan saber qué pasaría si se flexibilizan los criterios para ser una persona activa laboralmente: (i) estar trabajando, (ii) no trabajar, pero buscar trabajo o (iii) no trabajar, pero estar disponible para hacerlo. De esta manera, el indicador busca cuantificar qué parte de la población activa, asumiendo las tres condiciones anteriores, no se encuentra trabajando y por lo tanto está subutilizada.

La subutilización en concreto afecta a los trabajadores, la economía y a la sociedad de manera negativa, por cuanto para los trabajadores está asociada a la precariedad del empleo, limitando e impidiendo por ende todas sus competencias laborales y su potencial en el mercado laboral; enfrentando la incertidumbre de saber cuándo encontrarán un empleo. Estos factores negativos golpean directamente a la economía, dado que no puede absorber con empleos formales a quienes están subutilizados. Por tanto, la economía no crece en los parámetros proyectados y la sociedad en suma tiene un mayor costo social.

Contar con indicadores de subutilización de la fuerza de trabajo es muy importante, ya que son datos y cifras complementarios a los indicadores tradicionales, que se emplean en el análisis y evaluación del mercado laboral, como son la tasa de desocupación, ocupación y participación. Esta información adicional que entregan estos indicadores complementarios permite que las autoridades y expertos en materia pública y en mercado laboral, tengan información adicional para elaborar Políticas Públicas interviniendo de manera amplia y sistémica las rigideces que presenta el mercado.