Guía práctica para el cuidado de sus pies

Las enfermedades crónicas como la Diabetes e Hipertensión Arterial y el dolor de pies afectan la calidad de vida, autoestima y la movilidad de millones de personas, especialmente de los adultos mayores. Sin embargo, el público en general no somos conscientes de la importante relación entre la salud del pie y la salud y el bienestar general.

Con esta idea, quisiera compartir algunos consejos para ayudar a mantener sus pies sanos día a día:

Revisión

  1. Examine sus pies regularmente. Si le dificulta examinar las plantas de sus pies, ayúdese con un espejo, en caso de que no se encuentre acompañado.
  2. Ponga atención a los cambios en el color y la temperatura de sus pies.
  3. El aumento de grosor o cambio de color de sus uñas puede ser una señal del desarrollo de alguna patología.
  4. Sea cauteloso al utilizar “remedios caseros” para las dolencias del pie, la automedicación puede dar lugar a un problema mayor al que se pretendía tratar.
  5. Evite el uso de bolsas de agua caliente, acercar sus pies a fuentes de calor, especialmente si padece de Diabetes, podría provocarle serias quemaduras.

Lavado y secado

  1. Lávese los pies regularmente, con agua tibia y jabón.
  2. Seque cuidadosamente sus pies, especialmente entre sus dedos, con toalla personal de tela, papel o secador de pelo con función aire frío. La humedad invita a la aparición de hongos, grietas y heridas.
  3. Después de un buen lavado y secado de sus pies, aplique crema en dorso y planta, no entre sus dedos.
  4. Corte sus uñas de forma recta, pero no demasiado cortas.

Calcetines

  1. Trate de utilizar calcetines o calcetas de fibras naturales como algodón, hilo, bambú, cobre.
  2. Si padece de Diabetes, colóquese calcetines o calcetas con las costuras hacia afuera.

Zapatos

  1. Cerciórese de que sus zapatos sean los adecuados para sus pies. Compre los zapatos al final del día, momento en que los pies tienden a estar más dilatados.
  2. Compre zapatos de su número, taco de no más de 4 cm. de altura y punta redondeada y amplia.
  3. Dentro de lo posible, evite utilizar calzado de materiales sintéticos.
  4. Evite el uso de calzado de otra persona.
  5. Trate de alternar sus zapatos y elimínelos cuando estén desgastados y/o deformados.
  6. Intente no usar los mismos zapatos todos los días.
  7. Ventile diariamente su calzado.
  8. Seleccione el calzado indicado para la actividad que va a realizar (es decir, para trabajar, caminar, correr, realizar ejercicios, deportes, etc.).
  9. Evite desplazarse descalzo, sus pies tendrán más riesgo de lesiones e infecciones.