El ABC de la inflación: un panorama inquietante

Sin duda la designación de Mario Marcel como Ministro de Hacienda se presenta de forma positiva para el panorama económico de Chile, pudiendo lograr la estabilización de la inflación en su periodo de ejercicio.

Al tener la experiencia como presidente del Banco Central (BC) desde el 2016, Marcel tiene la posibilidad de continuar aplicando estrategias económicas ahora desde la Hacienda. Desde el BC se llevaron a cabo medidas para aquietar la expectativa de los inversionistas durante la crisis social del año 2019 además de las medidas excepcionales y la disminución de las tasas con la llegada de la pandemia, advirtiendo también de los negativos efectos financieros de los retiros desde las AFP (dentro de estos figuraba que la inflación incrementaría).

Al manejar estas situaciones desde un cargo de gran importancia como el que tenía (y donde los procesos antiinflacionarios son el centro de atención) Mario Marcel está en plena capacidad para los retos, variaciones y novedades económicas que puedan presentarse ya que es una persona moderada y con gran experiencia internacional, tanto que con su nombramiento los mercados económicos se calmaron teniendo una reacción positiva, inclusive el día viernes pasado el dólar inició su jornada en $794, el valor más bajo desde noviembre 2021.

Por lo que las expectativas son altas. De seguro la visión ortodoxa, mesurada y racional de Marcel será un gran aporte en el apartado económico del país al frente del Ministerio de Hacienda. Ahora, hablando con peras y manzanas: ¿qué es la inflación y por qué sucede?

La inflación es un efecto económico que consiste en el aumento generalizado y sostenido de los precios de la canasta básica en una nación. Esto resulta del aumento de la demanda agregada o disminución de la oferta agregada, lo que trae como consecuencia el incremento del dinero circulante.

Al contar con bajas tasas de interés que propicien el consumo más que ahorro, aumentaría la demanda de productos/servicios y con una oferta (producción) que no se ha elevado habrá más dinero en la calle y este perdería su valor. Por otro lado, si la oferta de productos/servicios se ve afectada por el aumento en los precios de la materia prima el precio de los artículos también subirá, entonces se deberá pagar más por la misma cantidad de producto, haciendo nuevamente que descienda el poder adquisitivo del dinero.

Por ejemplo, si en nuestra economía existen 3 sillas y $6.000, cada silla tendrá el valor de $2.000. Si el gobierno duplica la cantidad de billetes pero la cantidad de sillas fabricadas se mantiene, cada una tendrá el precio de $4.000. Los precios subieron ya que hay mayor cantidad de dinero en circulación a causa de la emisión de nuevos billetes, perdiendo su poder adquisitivo.

Tendrás hoy más dinero que ayer, pero podrás comprar menos.

Así, recuperar el control de los precios y disminuir el dinero circulante en la economía son los objetivos centrales para controlar la inflación en el país, y para ello se llevan a cabo diferentes políticas como las monetarias, fiscales, de oferta y cambiarias.

La principal herramienta de las políticas monetarias son las variaciones en su tasa. En este apartado el Banco Central (BC) es quién controlaría la inflación en el país, ya que es el ente regulador del dinero circulante en la economía. Para ello utiliza la Tasa de Política Monetaria (TPM) la cual estipula el interés al cual le prestaría dinero a las instituciones financieras de la nación.
Al aumentar esta tasa disminuye el atractivo de la solicitudes de préstamos por lo que bajaría el dinero circulante.

En las políticas fiscales resaltan la reducción del gasto público y el incremento de los impuestos los cuales afectan la demanda agregada al disminuirla y por ende habría menor circulación de efectivo.

Las políticas de oferta (bien sean orientadas al mercado o las intervencionistas) también influyen. Al propiciar el incremento de la producción aumenta la tasa de crecimiento promedio de la economía, con ello se controlan los precios de los productos y se mantendría o bajaría el precio de los mismos.

Con las políticas cambiarías es posible controlar la inflación a través de la tasa cambio (TC). Al aumentarla se crea un escenario que traería como consecuencia el decrecimiento progresivo de los precios de importación, esto disminuiría a su vez los precios de estos productos al ser comercializados y adquiridos por la población.

Pero, ¿siempre seguirá apareciendo la inflación? Es posible controlarla en un escenario económico sin variaciones importantes y aplicando las políticas pertinentes. Sin embargo, con una economía nacional afectada por la crisis social de noviembre del 2019 y que luego se ve perturbada (y aún lo está) por el impacto de la pandemia causada por el COVID19, el panorama económico en Chile refleja que seguiremos enfrentándonos a la inflación.