Desperdicios alimentarios y su impacto multifactorial
Los alimentos se pierden o desperdician a lo largo de toda la cadena alimentaria, desde la producción agrícola inicial hasta el consumo final en los hogares. En los países de ingresos altos y medianos, los alimentos se desperdician de manera significativa en la etapa del consumo, lo que significa que se desechan, incluso si todavía son aptos para el consumo.
En las regiones industrializadas, también se producen pérdidas importantes al principio de las cadenas de suministro de alimentos. Las pérdidas de alimentos conllevan el desperdicio de recursos utilizados en la producción, como tierra, agua, energía e insumos. Producir comida que no va a ser consumida genera altas emisiones innecesarias de CO2 además de pérdidas en el valor añadido de los alimentos producidos, lo que impacta significativamente en el medio ambiente y calentamiento global.
A nivel económico, las pérdidas de alimentos que pueden evitarse tienen un impacto negativo directo en los ingresos, tanto de los agricultores como de los consumidores. Puesto que muchos pequeños agricultores viven al margen de la inseguridad alimentaria, reducir las pérdidas de alimentos podría tener un impacto inmediato y significativo en sus medios de vida. Sin duda, la prioridad para los consumidores pobres (hogares en situación de inseguridad alimentaria o de riesgo) es el acceso a productos alimentarios nutritivos, inocuos y asequibles. Cabe mencionar que la inseguridad alimentaria es, a menudo, más una cuestión de acceso (poder adquisitivo y precio de los alimentos) que de suministro. Mejorar la eficiencia de la cadena de suministro de alimentos puede ayudar a disminuir el coste de los alimentos para el consumidor y así, aumentar el acceso a estos. (Stuart, 2009)
Para aquellos que viven en la pobreza o con unos ingresos familiares limitados, desperdiciar alimentos es algo inaceptable. Otro factor del reducido desperdicio en algunos países, es que los consumidores suelen comprar pequeñas cantidades de productos alimentarios, a menudo simplemente lo suficiente para las comidas del día.
Existe un número importante de iniciativas que buscan minimizar las pérdidas y desperdicios de alimentos en las distintas fases de la cadena alimentaria, principalmente mediante inversiones en infraestructura, aumentar el capital físico y educar a la población. La estrategia para la reducción de pérdidas y desperdicios de alimentos debiera basarse en Información y comunicación a través de campañas de sensibilización a la comunidad, y a todos los actores involucrados en la cadena alimentaria.
Nutrición y Dietética de la Universidad Santo Tomás, cuenta con un sello diferenciador a otras casas de estudio. Implementando en nuestro internado Intraescolar, actividades relacionadas con el desperdicio de alimentos, creando así, consciencia desde edades tempranas, al poder trabajar con niños en etapa pre escolar, sobre la importancia de la reutilización y disminución de los desperdicios alimentarios.
Consejos prácticos
- Planifica un menú semanal.
- Haz una lista de compras con los productos necesarios para tu planificación semanal o mensual.
- Almacena adecuadamente los alimentos, diferencia entre la fecha de caducidad y la de consumo preferente.
- Congela correctamente los alimentos.
- Calcula adecuadamente las cantidades.
- Aprovecha los alimentos para otra comida o preparación.