Durante la crisis que estamos viviendo, producto del Covid-19, las personas nos encontramos propensas a sufrir de ansiedades, ya que nos encontramos en un estado de alerta, expectantes a lo que va sucediendo. Para disminuir estos estados ansiosos, los humanos desarrollamos diferentes hábitos, como el consumo de tabaco.

Al momento de fumar un cigarro, la persona se distrae de la situación, actuando como un placebo para el sistema nervioso, a pesar de que el cigarro no tenga propiedades antiestrés. De hecho, es todo lo contrario; el cigarrillo es un estimulante que produce el efecto placebo de disminuir la ansiedad mientras se consume.

¿El problema? Cuando el efecto del tabaco se termina, ocurre todo lo contrario, aumentando la sensación de ansiedad, produciendo incluso estados de abstinencia cuando no se consume por periodos prolongados.

¿Cómo vivir la cuarentena sin tabaco?

Este 31 de Mayo se conmemora el Día mundial sin tabaco, en un año donde hemos visto modificados la mayor parte de nuestros hábitos, pudiendo haber aumentado el consumo de cigarros.

Existen terapias complementarias que ayudan a disminuir los niveles de ansiedad que, finalmente, son las que producen la dependencia de estas sustancias como el tabaco, el alcohol, e incluso la comida.

Una de las terapias que nos permite controlar esta necesidad o dependencia es la meditación, que a través de una respiración consciente, en un lugar silencioso, logra disminuir nuestros niveles de ansiedad, de una manera saludable, sin repercutir en nuestra salud como aquellos hábitos nocivos.

La meditación la podemos acompañar de sonidos armónicos como la lluvia, olas del mar, cuencos, viento; y de aromas relajantes por medio de inciensos o difusores. Algunos aromas que recomiendo son la lavanda, limón, jazmín, e incluso el café.

Existen diversos tipos de respiración, que se realizan en función de lo que queremos lograr. En este caso, para disminuir el estrés y la ansiedad, la técnica es desviar nuestra atención hacia la punta de nuestra nariz fijándonos en las veces que inhalamos y exhalamos. Cuando fijas tus ojos en esa parte de tu anatomía, la mente automáticamente bloquea cualquier otro tipo de pensamiento.

Otro método para respiración consciente es utilizar 3 segundos para inhalar y otros 6 segundos para exhalar. Es decir, se exhala en el doble de tiempo que utilizamos para inhalar.

Finalmente, cuando las condiciones lo permiten, existe la posibilidad de realizar Auriculoterapia, ya que, a través de la estimulación de ciertos puntos de la oreja, la persona va reduciendo el hábito de fumar, de manera paulatina, llegando a dejarlo por completo en algunos casos, cuando el paciente mantiene el tratamiento de una manera ordenada y constante.

El llamado es a cuidar nuestro cuerpo por completo, sobre todo en periodos de cuarentena, para no abusar de sustancias que nos podrían perjudicar a largo plazo.