Calidad de vida y enfermedades cardiovasculares

A nivel mundial durante agosto se celebra el mes del Corazón. Si pensamos en nuestro país, y según cifras del Ministerio de Salud, la principal causa de muerte en adultos mayores de 40 años, es la enfermedad cardiovascular, principalmente el Infarto Agudo del Miocardio (IAM), que afecta directamente a nuestro corazón, donde mayoritariamente por un factor genético el sexo masculino es más propenso (27% de mortalidad), sin embargo las mujeres también están cada día presentando patologías cardíacas, que en algunos casos también han significado la muerte.

Factores de riesgo

Para ambos géneros los factores de riesgo que inciden a ser propenso a sufrir los infartos son: el sedentarismo, sobrepeso, obesidad, tabaquismo y estrés.

Lo anterior constituye un gran problema de salud pública, ligado a las condiciones de vida particulares de cada persona, sus hábitos, factores de riesgo y situaciones que pueden empeorar o mejorar la salud cardiovascular.

Ahora, si hablamos de mortalidad a causa de la enfermedad cardíaca, no hay que dejar de lado qué sucede con las personas que logran recuperarse de estos eventos y a diferencia del pasado ahora los estudios indican que existe una alta probabilidad de rehabilitación.

Los avances tecnológicos, la precocidad del diagnóstico y el actuar a tiempo, han logrado mejorar la sobrevida de la población, lo cual está muy relacionado con el concepto de la “Calidad de Vida” posterior que tendrán los pacientes, ya que mientras antes se actúe, menor será el compromiso y daño del corazón cuando se infarte.

También existen planes de rehabilitación donde lo más beneficioso es el llamado ejercicio aeróbico en el cual el paciente realiza una terapia que incluye: caminar, correr, pedalear en bicicleta y nadar. En este tipo de actividades se movilizan muchos músculos. Mientras que el ejercicio estático o anaeróbico (como el levantamiento de pesas) tiene menos efectos positivos para el corazón y puede resultar peligroso si no se hace de forma controlada.

Es por eso que para evitar problemas coronarios, es necesario realizarse chequeos de manera frecuente para evitar un IAM. Lamentablemente si se produce uno de estos, puede desembocar en un cuadro clínico de mayor compromiso y gravedad, como la Insuficiencia Cardíaca (IC), enfermedad que se relaciona con la capacidad de bombear sangre de nuestro corazón, por lo que es una patología de alto riesgo y deterioro de la calidad de vida, siendo la consecuencia más preocupante el aumento del nivel de discapacidad que se observa en la población que la padece.