Vivir con autismo: la importancia de la detección temprana

Ghilian Navea -autista- y activista en redes sociales se refirió a las complejidades y desafíos que reviste para la sociedad el poder abordar esta temática desde un punto de vista inclusivo y durante las distintas etapas de la vida.

Con el objetivo de conocer en primera persona la realidad que viven a diario las personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA), el Área de Educación del Centro de Formación Técnica Santo Tomás Sede Santiago Centro, realizó la charla “Neurodivergencia y los mitos sobre la eterna infancia”.

Para ello, se contó con la presentación de Ghilian Navea, mujer autista quien además es una asidua usuaria de redes sociales, las que utiliza para educar y concientizar sobre las personas con TEA.

“El término neurodivergente fue concebido en la comunidad autista para referirse a personas cuya neurología es atípica. Hoy, no solo involucra el autismo, sino que incorpora además el déficit atencional, dislexia, epilepsia, dificultades con el lenguaje, entre otras”.

Agregó que “son parte de nuestra identidad (…) es algo que compartimos especialmente en comunidades del espectro autista, donde las etiquetas por así decirlo van con nuestra situación, ya que soy autista. Es algo que no me puedo sacar o dejarlo”.

Discapacidad y adultez

Una de las situaciones más comunes en el TEA es el tardío o erróneo diagnóstico que se entrega por parte de los especialistas y que según explicó Ghilian “tal fue mi caso, lo que se tornó complejo, hasta que después de varios procesos, supe que tenía autismo, dando un giro y sentido a mi vida”.

“Esto, me permitió ser ‘yo’ en distintos contextos y tener la claridad de que no necesitaba encajar en todas partes, solo que aún no lo entendía. Si bien todos somos distintos, quienes tenemos el espectro nos caracterizamos por ciertos patrones de comportamiento que nos hacen darnos cuenta que no estamos solos”.

Educar la diferencia

Durante su presentación, Ghilian, enfatizó en la importancia que reviste la educación como enriquecimiento de la diversidad e inclusión. “No debemos catalogar a las personas en relación con su productividad, así como también evitar los prejuicios y comprender que las personas autistas tienen derecho a ser escuchadas y comprendidas”.

“Por el hecho de ser autista y parecer que estamos en otro mundo, a la gente se le olvida que somos parte del mismo sistema y por ende, soy un ser humano con pensamiento y juicio propio”, puntualizó.

Asimismo, indicó que el autismo no es una enfermedad, sino una condición y en ese sentido es importante entender que nos acompañará toda la vida. Por ello, resulta complejo el no comprender la importancia del acompañamiento que necesitan las personas adultas con espectro autista”.

“Si no abordamos esta situación desde la comprensión, es probable que con el tiempo, tengamos un adulto con dificultades en la conformación de su identidad y con resentimientos de índole social”, concluyó.

La Charla “Neurodivergencia y los mitos sobre la eterna infancia” contó además con la participación de Carolina Cartes, Directora Carreras Área Educación Sede Santiago Centro. En tanto, la moderación estuvo a cargo de Daniela Puelma, Jefa de Carrera Técnico en Educación Especial Sede Santiago Centro.