Mes del libro:

Santo Tomás obsequió 100 libros en el centro de Punta Arenas

Los textos fueron donados por estudiantes de la institución y distribuidos en lugares específicos de la ciudad, identificados en un mapa correspondiente a la Ruta del Libro.

Como una de las actividades que buscaban conmemorar el Mes del Libro, durante todo abril, Santo Tomás Punta Arenas realizó una campaña de donación de libros de lectura, en la que participaron estudiantes, docentes y administrativos de la institución, logrando recolectar 460 libros de todos los géneros literarios, en una campaña que también formó parte del mechoneo solidario.
Un número importante estos libros fueron envueltos por estudiantes de la carrera Técnico en Educación Parvularia, quienes a través de habilidades de manualidad le otorgaron un toque creativo y artístico para transformarlos en un obsequio. Cada uno de estos texto que, posteriormente fueron distribuidos en algunos sectores de la ciudad, incluían un mensaje que decía “si este libro llegó a tus manos es porque él te ha encontrado, súmate leyendo sus páginas en la ruta de la lectura de Santo Tomás”.

Ruta del libro y la lectura

Con el propósito de acercar la lectura a la comunidad, Biblioteca de Santo Tomás junto al Área de Educación de la institución, realizaron la actividad Ruta del Libro y la Lectura, iniciativa que tuvo en primera instancia realizar una campaña de recolección de libros. el team de la lectura de Santo Tomás, que está conformado por estudiantes del área de la Educación y Biblioteca, ubicaron una selección de estas obras en distintos lugares del centro de Punta Arenas, con el propósito de que ‘este libro’ encuentre a sus nuevos lectores.

Al respecto, Amira Parra, jefa de Biblioteca de Santo Tomás, comentó que “a manera de cierre de las actividades del mes del libro, estuvimos distribuyendo libros que fueron donados por los tomasinos en diferentes puntos del centro de la ciudad. Corresponden a diferentes géneros literarios que nuestros estudiantes tenían en sus hogares, que ya no ocupaban y que decidieron donarlos para darles una segunda oportunidad”.

Para Maria Paz Jaime, estudiante de Técnico en Educación Parvularia, esta actividad “es muy buena, porque es un incentivo a la lectura y que también llega a toda la comunidad”, dijo la estudiante.

En total se repartieron 100 libros en distintos puntos del centro de la ciudad. Con el resto de los textos, alrededor 360 libros, se creará un espacio permanente en la biblioteca de la institución para que los estudiantes puedan asistir y llevarlos a sus hogares, como también aportar con alguno de sus libros a modo de intercambio cultural.