La triquinosis es una enfermedad mortal que se produce por el consumo de carne infectada con parásitos, el cual se busca prevenir a través de la reglamentación que estipula que todo producto cárnico antes de salir al mercado debe ser fiscalizado por la técnica de triquinoscopía, método que el curso “Actualización y Certificación en Triquinoscopía” busco estandarizar.

La Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad Santo Tomás Temuco, realizó el primer curso de “Actualización y Certificación en Triquinoscopía”, cuyo objetivo, fue que los profesionales del área de la medicina veterinaria que asistieron a la jornada, entre ellos docentes de las diferentes sedes de Santo Tomás, lograran estandarizar la norma técnica Nº62 del Ministerio de Salud (MINSAL), sobre “inspección medico – veterinaria de reses y sus carnes” que estipula que todo producto cárnico, antes de salir al mercado, debe ser fiscalizado por la técnica de triquinoscopía, de esta manera evitar la enfermedad de triquinosis que se produce por un parasito que se transmite desde la carne hacia las persona.

Los expositores del curso José Hidalgo, Médico Veterinario, Magíster en Ciencias mención Biología Celular y Molecular Aplicada junto con Loreto Uribe, Médico Veterinario, Magíster en Salud Pública y Jefa del Subdepartamento Zoonosis y Vectores de la Seremi de Salud, abarcaron temas de la Triquinoscopía actual en La Araucanía, métodos de diagnóstico, ciclo biológico de triquinella y la estandarización de la técnica según la normativa vigente.

El director de la Escuela de Medicina Veterinaria de la UST Temuco, Waldo Armstrong, señaló: “Lo que queremos con esta certificación es colaborar como institución, dentro del marco de nuestra participación en el  Comité Regional de Zoonosis, en tratar de estandarizar la técnica de triquinoscopía y que se realice en una forma particular y que además, se genere un certificado que lo compruebe, para que todos los médicos veterinarios del día de mañana, que realicen  este métodos lo ejecuten abalados por una institución externa”.

Por su parte, Claudia Molina, docente de la carrera de Técnico Veterinaria y Producción Pecuario de Santo Tomás Rancagua y participante del curso, señalo la importancia que tiene para ella recibir esta certificación: “Me parece interesante y muy importante que se realicen este tipo de certificaciones, que nos ayudaran a transmitir con bases y respaldo los conocimientos a nuestros estudiantes”

Para validar los conocimientos adquiridos en el curso, los participantes debieron responder una prueba teórica práctica, que les daba la certificación de la especialización.

Según los expertos

Si alguien come carne que está con “triquina” tiene un periodo de incubación de 7 a 45 días, pero que dependiendo de cuánta larva consumió, puede ser incluso mortal. Cabe destacar, que la última persona que falleció por Triquinosis fue en el 2011 en la comuna de Nueva Imperial en La Araucanía, por lo tanto, la realización de este curso, tuvo un valor fundamental en la prevención de estos sucesos.