Recordando el episodio en que Jesús se pone al servicio de sus discípulos, estudiantes de la sede Rancagua culminaron sus clases para dar paso a la práctica laboral.

En una ceremonia inundada de recuerdos, los estudiantes de Podología Clínica de la sede Rancagua recibieron el sello Santo Tomás que prenderán en su pecho al realizar su práctica laboral.

Con la imagen de Jesús lavando los pies a sus discípulos, el Rector de Santo Tomás les recordó a los estudiantes: “El más grande de todos se puso al servicio de los más humildes, no olviden esto en sus prácticas y en su vida laboral”.

Por su parte, la Jefa de Carrera, Patricia Olavarría, entregó su mensaje a los alumnos: “No teman porque han recibido todas las herramientas para desempeñarse con eficiencia”.

María de los Ángeles Guzmán entregó algunas palabras en representación de sus compañeros. Recordó anécdotas del curso y a los profesores, a quienes agradeció al igual que a familiares y amigos. “No olvidemos que para recorrer los caminos del éxito debemos tener sueños y aprender a hacerlos realidad”, recalcó, destacando la importancia de tener confianza en sus habilidades y, “sobretodo ser felices”.

María de los Ángeles compartió también con los presentes un video con imágenes de estos cuatro semestres en la carrera Podología Clínica. La docente Claudia Sepúlveda dirigió a los estudiantes en la lectura del juramento que cerró esta ceremonia.