Experta en Nutrición de UST Viña del Mar entrega recomendaciones alimentarias para Semana Santa

Natalia Rivera, académica de la carrera de Nutrición y Dietética, se refiere a las precauciones que se deben considerar en estas fechas al consumir pescados, mariscos y huevos de chocolate.

En materia alimentaria, Semana Santa es sinónimo de dos tradiciones: consumir pescados y mariscos en Viernes Santo y entregar huevitos de chocolate a los niños en Domingo de Resurrección. Dos costumbres muy arraigadas en la cultura popular, pero que pueden causar complicaciones si no se respetan algunas consideraciones elementales. Natalia Rivera, académica de la carrera Nutrición y Dietética de Universidad Santo Tomás sede Viña del Mar, entrega algunas recomendaciones para este fin de semana.

Respecto a la tradición de comer productos extraídos del mar, la docente advierte que en nuestro país es habitual la preparación de ceviche, “el cual puede terminar produciendo un daño severo a la salud si no se toman las precauciones necesarias de adquisición, manipulación y conservación”. Los consejos serían, entonces “recordar que podemos utilizar preparaciones que no necesariamente lleven pescado, como legumbres, ensaladas, tortillas e incluso ceviches de verduras como champiñones o cochayuyo; y tomar las precauciones necesarias si lo que se quiere es comer ceviche de pescado o mariscos”.

“Esto quiere decir, comprar el pescado en el comercio autorizado (fresco, ojalá sellado y revisando la fecha de envasado y vencimiento), mantenerlo refrigerado o congelado dependiendo de la anticipación de la compra, comerlo apenas se prepare e idealmente elaborarlo con pescado cocido, recordando que el limón no cuece los alimentos. Tampoco hay que olvidar las medidas de higiene básicas como lavado de manos, uso de agua potable y evitar la contaminación cruzada entre alimentos crudos y cocidos”, señala.

 Huevos de chocolate para niños

Respecto a los huevos de chocolate, la académica de UST Viña del Mar dice que “esta tradición tiene la desventaja de producir generalmente un consumo excesivo de chocolate -rico en azúcar y grasas- en los niños y, considerando que Chile se ubica entre los países con mayores niveles de sobrepeso y obesidad infantil a nivel mundial, es una costumbre que debemos empezar a modificar hacia prácticas más saludables”.

¿Cuáles son las recomendaciones al respecto? Natalia Rivera explica que “lo primero sería tratar de esconder los huevitos en distintos lugares de la casa o al aire libre si el clima lo permite, para fomentar la imaginación y actividad física en los niños mientras buscan sus sorpresas. Otra idea es reemplazar los huevos de chocolate por otros alimentos parecidos en aspecto, pero más saludables como huevos de codorniz, uvas sin pepa, tomates cherry, aceitunas sin cuesco, o cualquier otra fruta o verdura con forma similar al huevo, las cuales se pueden mezclar para resaltar sus distintos colores y texturas e incluso envolver en papeles llamativos para que los niños disfruten abriéndolos y descubriendo lo que hay. Se debe tener siempre presente que los niños más pequeños deben estar bajo el cuidado de un adulto al momento de alimentarse”.

Por último, si no se quiere excluir al chocolate de esta festividad, “la mejor opción sería escoger los huevos pequeños y sin relleno, para que entreguen menos calorías en el mismo volumen que uno macizo o con otros dulces en su interior. También hay que tratar de comprar aquellos que tengan mayor contenido de cacao y menor cantidad de azúcar y, lo más importante, racionar cualquiera de estas opciones para que los más pequeños de la casa no se coman todo junto, sino que lo vayan distribuyendo como colaciones durante los días siguientes considerando que una colación debe aportar entre 100 y 150 kcal aproximadamente dependiendo de la edad del niño. Hay que considerar que un huevito pequeño de chocolate macizo o relleno aporta alrededor de 40 kcal versus un tomate cherry con 3 kcal, una aceituna con 22 kcal, un huevo de codorniz con 14 kcal y una uva con 7 kcal”.

 

Natalia Rivera, académica UST Viña

Natalia Rivera, académica de la carrera de Nutrición y Dietética UST Viña del Mar.