Escoja informado: Prevencionista de Riesgos entrega recomendaciones para elegir el tipo de calefacción más adecuada para nuestro hogar

Este fin de semana largo vuelve la lluvia y las bajas temperaturas a la zona central y por tanto se hace necesario explorar alternativas para calefaccionar nuestro hogar.

Eficiencia, calor, tamaño y seguridad son algunas de las variables que manejamos a la hora de escoger un sistema adecuado y para esto el docente de la carrera Ingeniería en Prevención de Riesgos de la sede Santiago Centro, Felipe Vilches nos entrega algunas recomendaciones para calefaccionar nuestro hogar de forma segura y de acuerdo a nuestras necesidades.

Dimensionar los espacios

Uno de los puntos fundamentales a la hora de escoger un sistema adecuado es que este se adapte a las características y necesidades del lugar.

El primer aspecto a considerar son los metros cuadrados que tiene el espacio que queremos calefaccionar, ya que las dimensiones de la habitación y el nivel de ventilación de aire de cada espacio, es uno de los factores esenciales para escoger un sistema de calefacción.

Otro punto relevante es la eficiencia energética y capacidad calórica del artefacto, ya que algunos  calentar fácilmente 20 metros cuadrados y otros menos cantidad, por lo que incluso podrías necesitar más de una estufa para calefaccionar una misma habitación.

Al respecto el docente Felipe Vilches recomienda:

“Si vas a comprar una estufa para tu hogar debes considerar que, en términos de contaminación, las más dañinas son las que usan gas licuado y parafina, mientras que las que generan calor “limpio” son las eléctricas, pero son las menos eficientes. Es decir, calefaccionan a un valor mucho más alto en comparación a otras”.

La ventilación del hogar es algo que también debemos considerar ya que hay estufas que requieren de ventilación constante del ambiente, como las de gas o parafina con mecha.

Si tenemos alguna habitación en casa que no tenga ventilación o sea mínima ( como por ejemplo el baño) es mejor no calefaccionarlos o privilegiar sistemas eléctricos y oleoelectricos adecuados para esto y por un corto periodo de tiempo.

Pensar siempre en la seguridad

Para quienes viven en departamentos las opciones para calefaccionar el hogar no son muchas, ya que por lo general existen medidas de seguridad más estrictas en los reglamentos de copropiedad de los condominios.

Pensando en los espacios, seguridad y ventilación, a diferencia de otros tipos de calefacción, las estufas eléctricas tienen la ventaja de no contaminar el aire de las habitaciones, por lo que pueden estar encendidas por más tiempo.

A excepción de éstas, el resto de las estufas contaminan el aire de las habitaciones, pues emiten gases mayormente tóxicos, como las de gas licuado o catalítico que emiten principalmente monóxido de carbono.

Es por esto que el docente recomienda contar con una ventilación adecuada al utilizarlas y recalca que: “es importante que las personas no se queden solas en una habitación con este tipo de calefacción, ya que si hay una fuga o escasea el oxígeno es más difícil reaccionar, teniendo en cuenta que los gases tóxicos de algunas estufas pueden llegar a provocar la muerte si no se actúa a tiempo”.

Otro de los sistemas de calefacción populares en esta temporada es la estufa a parafina, que también mantiene temperado nuestro hogar pero que, según el docente, genera contaminación intradomiciliaria ya que además de emitir monóxido de carbono como otras estufas, genera otros gases irritantes, que no producen muerte por intoxicación, pero que se deben evitar en caso de que algún miembro de nuestra familia tenga alguna enfermedad respiratoria.

Mantener la temperatura

Con la llegada del frío el panorama ideal es mantener nuestra casa lo más cálida posible y por lo general, cuando

tenemos niños en el hogar, tendemos a calefaccionar demasiado los espacios, lo que muchas veces genera enfermedades por los bruscos cambios de temperatura al salir de casa e incluso al cambiar de una habitación a otra menos temperada.

Si hay niños o personas que puedan generar enfermedades respiratorias lo recomendable son las estufas eléctricas ya que temperan rápidamente espacios más pequeños, teniendo en cuenta que este tipo de calefacción consume más electricidad lo que puede generar una abultada cuenta a fin de mes, por lo que Vílchez recomienda temperar durante el tiempo suficiente (aproximadamente 20 minutos) y después cerrar puertas y ventanas para mantener el calor en la habitación.

Además, el docente de Prevención de Riesgos nos indica que

“La temperatura ideal debe ser entre 18° y 22°C, lo que implica mantenerse relativamente abrigado dentro de la casa o departamento para evitar sobrecalefaccionar una habitación”.

Para finalizar les entregamos algunas recomendaciones generales sobre el uso de artefactos de calefacción en nuestro hogar, y les recordamos la importancia de su uso responsable para cuidar la seguridad de nuestra familia.

  • Apagar la estufa antes de dormir.
  • Mantenerla alejada de elementos combustibles tales como ropa de cama, muebles, aerosoles o aceites, entre otros.
  • Ubicarla donde no entorpezca el paso normal.
  • Utilizarla sólo para su propósito, no se debe usar para secar ropa mojada o húmeda, ni para calentar comida.