Enfoque comunitario y el acento en la investigación: los sellos distintivos de la carrera de Fonoaudiología en UST Viña del Mar

Jorge Valdés, director de Escuela en la sede de la Ciudad Jardín, y Waldo Suárez, de la primera generación de titulados, destacan las virtudes y el amplio campo laboral que ofrece esta carrera.

Cuando a una persona le hablan de Fonoaudiología, inmediatamente aparecen dos imágenes en su cabeza: una escuela de lenguaje o una consulta médica. Pero en UST Viña del Mar llevan varios años desarrollando un perfil distinto para abrir nuevas opciones a los futuros profesionales. El énfasis en el trabajo comunitario y en la generación de conocimiento configuran el sello de esta carrera, distinguiéndola dentro del medio regional y nacional.

“Desde los primeros años de carrera se organizan operativos para que el estudiante tenga contacto directo con la comunidad y entienda que también se puede hacer fonoaudiología fuera de un box terapéutico”, explica Jorge Valdés, director de la Escuela de Fonoaudiología.

Lo mismo opina Waldo Suárez, titulado de la primera generación y quien hoy se desempeña en distintas áreas de la disciplina. “Las oportunidades que entrega la carrera en cuanto a la interacción con la comunidad nos permiten trabajar después en cualquiera de las áreas de la Fonoaudiología”, dice, agregando que “nosotros participábamos en grupos regionales de estudiantes de Fonoaudiología y cuando se hablaba de prácticas basadas en evidencia, de trabajo en la comunidad, éramos los que más opinábamos y participábamos. A nivel local aún no se hablaba de eso, entonces el perfil comunitario siempre fue nuestro sello”.

Investigación en Fonoaudiología

Junto a este marcado perfil comunitario, en la Escuela de Fonoaudiología de UST Viña del Mar en el último tiempo se ha puesto énfasis en fomentar la investigación desde los primeros años de la carrera. La idea es que los alumnos se integren desde muy temprano a los grupos de investigación encabezados por los docentes de la carrera.

“Se juntaron dos factores. Por una parte, a nuestro equipo docente llegaron dos doctoras que empezaron a fomentar la investigación dentro del grupo académico; y por otro lado, el proyecto educativo de Santo Tomás comenzó a promover políticas internas para que alumnos y docentes se dediquen a la investigación”, señala Jorge Valdés.

En su caso personal, Waldo Suárez recuerda que “desde tercer año los profesores nos empezaron a ‘apadrinar’, primero encargándonos cosas chicas como tomas de exámenes o audiometrías, para así involucrarnos en los proyectos de investigación. Además, ahora se exige que todas las tesis de título deben ser publicadas sí o sí”.

Esta orientación hacia la investigación no tiene que ver solo con el ámbito académico, sino que también abre otra opción laboral. De hecho, Jorge Valdés cuenta que ya hay algunos titulados que han elegido la generación de conocimiento como su campo de trabajo gracias a las redes de contacto que construyeron en su paso por la universidad.

Amplio campo laboral en Fonoaudiología

Ambos concuerdan en que aún mucha gente asocia la Fonoaudiología con la rehabilitación en problemas del lenguaje verbal, ignorando que el área de desempeño es mucho más amplia. “Un fonoaudiólogo no trabaja solo con niños en escuelas de lenguaje o en hospitales, puede trabajar con recién nacidos prematuros, con adultos mayores, con cantantes, etcétera. Como tenemos un perfil de egreso generalista, el estudiante de Santo Tomás tiene las competencias para desempeñarse en todas las áreas”, señala Valdés.

Waldo Suárez reconoce que aunque se informó muy bien antes de ingresar a la Educación Superior, solo descubrió el abanico de opciones que ofrece la Fonoaudiología una vez que comenzó a estudiar en Santo Tomás: “Uno entra pensando que Fonoaudiología solo tiene que ver con lenguaje, pero acá descubrí que hay una gran gama de opciones. De hecho, yo ahora trabajo con niños, con adultos y en audiología.

“La oportunidad de conocer esa variedad la encontré acá y eso me generó tranquilidad porque siempre se hablaba de las escuelas de lenguaje como única opción y acá descubrí que te puedes dedicar a muchas otras cosas”, añade.

Perfil del fonoaudiólogo de Santo Tomás

“A mí hace poco me invitaron a exponer en una mesa redonda sobre el campo laboral del fonoaudiólogo y los chicos de otras instituciones no sabían que se puede trabajar en investigación, pensaban que las únicas alternativas eran el área de lenguaje infantil, la consulta particular o el consultorio. El perfil del alumno de acá es completamente diferente”, agrega Waldo Suárez.

Para concluir, el director de la Escuela de Fonoaudiología de UST Viña del Mar indica que “el fonoaudiólogo sigue siendo un terapeuta, su labor principal es la rehabilitación, pero acá agregamos herramientas comunitarias y de investigación que le van a servir a nuestros egresados para tener prácticas más orientadas a la evidencia científica y que no hagan las cosas solo porque alguien se las enseñó, sino porque son profesionales críticos que saben analizar y hacer lo que realmente sea útil”.