Carreras de Técnico Agrícola y Gastronomía se unen para crear huerto orgánico en sede Limonares de Santo Tomás Viña del Mar

Las carreras de Gastronomía Internacional y Tradicional Chilena y Técnico Agrícola del CFT Santo Tomás Viña del Mar se unieron en un proyecto conjunto para crear un huerto orgánico en la sede Limonares.  El cuidado estará a cargo de los alumnos de la primera carrera mencionada, labor a la que se sumarán estudiantes de Psicopedagogía del IP, quienes solicitaron integrarse a esta iniciativa para aprender técnicas y luego replicar la idea en los establecimientos educacionales donde les corresponda desempeñarse en el futuro.

José Onetto, director de las carreras del Área Turismo y Gastronomía, comenta que “este proyecto nace de una inquietud de los estudiantes hace mucho tiempo. La idea estaba, pero faltaba el espacio. Pero como ahora el Centro de Esterilización del Área Salud se trasladó a la sede Uno Norte, quedó disponible ese sector y lo aprovechamos”.

La preparación del lugar, incluyendo el sistema de riego, fue supervisada por el jefe de carrera de Técnico Agrícola, Roberto Tapia. Fueron alumnos de esa carrera y los de Gastronomía quienes participaron en la siembra de tomates, zapallo italiano, perejil, cilantro, cebolla, orégano, menta, poleo y melisa. “Son todos alimentos de uso muy habitual en la cocina, así que los aprovecharemos en nuestros talleres y también cada vez que se vaya a utilizar el comedor didáctico”, complementa Onetto, añadiendo que “hoy en día muchos restaurantes están sumándose a la tendencia del autocultivo, entonces nuestros alumnos tenían las ganas de aprender del proceso de cultivo de algunos alimentos básicos”.

 El aporte de Técnico Agrícola

Por ese mismo interés es que el cuidado y limpieza de este huerto estará a cargo de los alumnos de Gastronomía Internacional y Tradicional Chilena. “Quizás programemos una charla del jefe de carrera de Técnico Agrícola para que nos explique todo el proceso, desde la siembra a la cosecha, pero la idea es que sean nuestros alumnos los que se hagan responsables del lugar”, finaliza Onetto.

Roberto Tapia, por su lado, resalta que el huerto se regará por goteo y microaspersión gracias a un sistema instalado por los mismos alumnos de su carrera. “Generalmente trabajamos con ellos en un campo en Quillota, pero también tenían ganas de hacer algo acá, en la sede, donde todos puedan ver de qué se trata nuestra carrera”, dice. El académico acota que la idea es no utilizar productos químicos, sino dejar que los productos crezcan solo gracias al aporte de agua y tierra de hoja.

 Psicopedagogía se suma

Y si bien este proyecto surgió de las carreras de Gastronomía y Técnico Agrícola, no pasó mucho tiempo para que despertara el interés de otras carreras. Es así como los alumnos de primer año de Psicopedagogía del Instituto Profesional también se sumarán al cuidado y limpieza del huerto.

“En una reunión de delegadas las alumnas se enteraron del proyecto y pidieron ver la opción de integrarse. La verdad es que no hay una asignatura en particular que esté relacionada con la agricultura o la gastronomía, pero siempre es positivo tener nuevas herramientas para innovar. Esta idea es perfectamente replicable por ellas en los establecimientos educacionales donde les toque trabajar en el futuro”, dice Verónica Herrera, jefa de carrera y directora del Área Educación del IP-CFT Santo Tomás Viña del Mar.