Noticia anterior
Docente de Ciencias Básicas participó en la actividad “1000 científicos, 1000 aulas”Pasantía en México
Miriam Bravo y su experiencia durante su pasantía en Monterrey-México
Por segundo año consecutivo alumnos del área de administración del IP Santo Tomás Curicó, tuvieron la posibilidad de acceder a un curso online que contempla una pasantía en la universidad TecMilenio de Monterrey.
Seis fueron los alumnos de las carreras del área de Administración del Instituto Profesional y Centro de Formación Técnica Santo Tomás Curicó, que tras realizar un curso online denominado “Negocios Internacionales”, dictado por la Universidad TecMilenio, en conjunto con la Escuela de Negocio y Administración de Santo Tomás, vivieron la experiencia de viajar por una semana a la ciudad de Monterrey en México.
Los estudiantes asistieron en compañía de Miriam Bravo Farías, directora de carrera del área de Administración de Sede Curicó, quien vio con sus propios ojos cómo esta experiencia benefició a los participantes, los nutrió de conocimientos y amplió sus horizontes.
Esta es la segunda vez que los alumnos tienen la posibilidad de realizar este curso online que se dictó de manera gratuita, y que en esta ocasión, incluía una pasantía de una semana en México.
“Para los participantes, el sólo hecho de salir del país, ya es una experiencia nueva”, comentó la directora.
¿Qué es lo que más rescata de este viaje?
Desde el punto de vista de los alumnos, sin duda, se abrieron puertas y las expectativas fueron superadas. Para ellos poder relacionarse y conocer jóvenes de allá, con los cuales compartieron ideas y se desenvolvieron de manera diferente, fue realmente positivo, porque las clases allá son muy participativas. Además de las visitas a museos y las charlas, rescato sobre todo la sicología positiva.
¿En lo pedagógico, qué es lo que más le gustó?
La cultura de lo positivo que existía, que no sólo se basaba en un discurso, sino que era una forma de vida, y esa energía se vivía en el ambiente. Por ejemplo, las aulas estaban diseñadas de manera distinta lo que permitía realizar clases más interactivas; se sentaban de a cuatro en los bancos de frente en grupo, lo que ayudaba a que fuera más prácticas.
De TecMilenio, ¿Qué es lo que más le llamó la atención?
Que existía un ecosistema de la felicidad, y el carácter, del que aprendimos y se puede desarrollar e implementar en nuestro entorno, sobre todo proyectar a los alumnos de primer año, los que a veces no vienen tan motivados de la enseñanza media. Esta metodología sirve justamente para revertirlo. Una herramienta clara que llamó la atención fue que en la entrada del edificio, había instalado un tablero digital con diferentes emociones alegría, diversión, inspiración, etc. En donde los alumnos decidían qué emoción querían vivir ese día y la registraban anotando su elección de forma virtual, la cual se reflejaba en la pantalla.
¿Y en lo personal?
Yo tuve que exponer ante los alumnos chilenos y mexicanos y hacerlos participar; experiencia que fue muy reconfortante y que como profesional sentí como un objetivo cumplido que me dejó un plus. A la vez, para mi es una responsabilidad, ya que estas experiencias te hacen crecer y ese cambio se tiene que notar y reflejar en el entorno, no se puede quedar como un bonito recuerdo; motivo por el cual pienso traspasar a mis docentes todo lo vivido, así como los alumnos que tuvieron esta gran oportunidad lo harán también.
Noticia siguiente
Académicos UST Santiago participaron en Congreso SOCHIPA 2016