Estudiantes de Ingeniería Civil Industrial e Ingeniería Civil en Minas se coronaron campeones del Torneo de Sustentabilidad Triple Impacto

Los estudiantes Bruno González, Vicente Abarca, Sebastián Aedo, Franco Uribe y Felipe García de las carreras de Ingeniería Civil Industrial e Ingeniería Civil en Minas de nuestra sede ganaron el Torneo con un proyecto que busca monitorear el consumo de agua.

El pasado 17 y 18 de agosto se llevó a cabo el lanzamiento del Torneo de Sustentabilidad Triple Impacto, el cual busca generar un espacio presencial en la Región Metropolitana para que estudiantes de Educación Superior vinculados a la ingeniería puedan fomentar el emprendimiento y la innovación de Triple Impacto, es decir, social, ambiental y económica, al interior de establecimientos educacionales.

En esta actividad participó la Facultad de Ingeniería de la Universidad Santo Tomás Santiago y la Facultad de Ingeniería, Ciencia y Tecnología de la Universidad Bernardo O’Higgins, quienes se adjudicaron este proyecto de CORFO, y al que las y los estudiantes de Universidades, Centros de Formación Técnica (CFT) e Institutos Profesionales (IP) debían postular a través del sitio oficial de Triple Impacto.

La bienvenida a esta jornada fue liderada por el Rector de la UBO, Claudio Ruff; el Rector de UST Santiago, Rodrigo Meriño; la Decana de la Facultad de Ingeniería, Ciencia y Tecnología, Katherine Delgado; y el decano de Ingeniería de Santo Tomás, Juan José Negroni. En la instancia, nuestro decano le agradeció al equipo que construyó Triple Impacto, asegurando que «gracias a ellos estamos acá y por ellos nos unimos ambas universidades para enfrentar este desafío».

«Me gustaría reflexionar sobre dos puntos de innovación: Uno, es que tenemos que innovar a lo largo de todas nuestras vidas, día a día. Cuando nos levantamos, cuando trabajamos, ahí enfrentamos la innovación. Siempre queremos hacer lo mejor, queremos que los otros también aborden de manera distinta y eficiente la labor y el trabajo. Innovar tiene que ser parte de nuestras vidas hoy por hoy. Para evolucionar en nuestras labores no es necesario que seamos emprendedores, pero sí lo es que seamos innovadores, que seamos capaces de empujar nuestro quehacer a diario», comenzó explicando.

«El segundo concepto que me gustaría acuñar es la empatía, ya que es la madre de la innovación. El ver al otro, entender al otro o comprender su problemática, ahí es donde está nuestra oportunidad y donde nosotros debemos ser grandes: Tenemos que saber satisfacer la necesidad del que está al lado nuestro, que la pueda ocupar, que pueda ser realmente eficiente para el medioambiente y la labor y por, sobre todo, ser amable con la realización de una labor en conjunto para así entender que la labor social, económica y medioambiental son parte real de la innovación«, añadió Negroni.

Tras dos días de Torneo y de intercambiar ideas entre equipos, que fueron formados de manera aleatoria entre las universidades participantes, estudiantes de Ingeniería Civil Industrial e Ingeniería Civil en Minas de nuestra casa de estudios resultaron campeones con un proyecto que «busca resolver la problemática que tenía Invexsa, la empresa que se les designó, creando una aplicación que concientice sobre el uso del agua, materializando los datos que ya tenía la empresa y que mide la mediación de los pozos«, señaló Vicente Abarca, de I.C.I. «Esto es para reducir el consumo de las napas subterráneas, con el objetivo de que éstas tienen más tiempo de rellenarse, ya que por la sequía ya no cuentan con una velocidad óptima de relleno», añadió.

Los estudiantes también recalcaron el apoyo que tuvieron por parte de los profesores de ambas universidades, asegurando que estuvieron a su disposición en cuanto a orientación y solución de problemas. «El primer día nos ayudaron harto con el enfoque, diciéndonos cuáles eran los pasos a seguir porque nos costó hacer un organigrama del proyecto, principalmente, porque nosotros no nos conocíamos. Pese a eso, y a los dos días que tuvimos para trabajar, todo salió súper bien y eso se vio reflejado en el resultado«, dijo Felipe García, de Ingeniería en Minas.

Para Sebastián Aedo, «ser parte del Torneo Triple Impacto fue una experiencia única, sobre todo porque este tipo de actividades se perdieron durante mucho tiempo por la pandemia, así que volver a esto y tener estas oportunidades de compartir con empresas y PYMEs fue súper motivador y entretenido el poder conocer un mundo al que como estudiantes no estamos acostumbrados. Fue, para la mayoría de nosotros, nuestra primera experiencia como profesional«, complementó Bruno González.

«El hecho de que nos pusieran una problemática y tener que atacarla ahí mismo, fue inspirador para nosotros seis», añadieron, asegurando que «medirse con compañeros de otras carreras deja entrever que todos tenemos buenas ideas y que éstas se pueden complementar, sin dejar la competencia sana que se reflejará en el futuro cuando seamos profesionales. Obviamente, también hay algo de satisfacción personal porque al ganar con nuestra idea pudimos concientizar a las personas sobre el consumo del agua y lo importante que está siendo la sequía actualmente«.

«Había harta competencia sana y eso igual fue entretenido, sobre todo para nosotros que trabajamos con Invexsa junto a otro equipo. El hecho de notar que cada grupo desarrollaba sus ideas de distintas maneras y el hecho que nosotros hayamos ganado lo hace súper inspirados. Fue una linda experiencia tras casi tres años online por la pandemia», sostuvieron.

Por último, nuestros estudiantes destacaron las palabras del profesor Sebastián Donaire, quien siempre les dijo que «en el tema de la invención no es crear la rueda, lo único que hay que hacer es darle un nuevo uso a ésta. Y esto nos sirvió para armar esta aplicación de monitoreo en pro de la comunidad, de las pequeñas familias, que son a quienes más les preocupa el consumo del agua y que, a su vez, no tienen cómo monitorearla porque no tienen los recursos necesarios».