Marcela García-Huidobro, psicóloga: “Los conflictos pueden ser oportunidades de aprendizaje y desarrollo emocional para los niños”

Durante el mes de julio de 2021 se ha estado realizando el taller de asertividad parental del Programa de Bienestar y Salud Mental Santo Tomás, dirigido por la psicóloga y docente de la Escuela de Psicología de la Universidad Santo Tomás, sede Santiago, Marcela García Huidobro. En tres sesiones realizadas los miércoles 07, 14 y 21 de julio entre las 17:00 y 19:00 hrs., las y los estudiantes de Santo Tomás recibieron orientación para ser asertivos en las relaciones de parentalidad.

El conflicto es un elemento inevitable en la parentalidad, sin embargo, el modo en que lo abordemos podría beneficiar o perjudicar la salud mental y el bienestar socioemocional de niños, niñas y adolescentes a nuestro cargo, así como el nuestro. La mejor manera de resolver los problemas de forma airosa, según expone la docente García-Huidobro en el taller, sería a través de la asertividad.

“La asertividad permite crecer en la relación, leer contextos en los que puedo intervenir y encontrar las palabras. Permite tener una comunicación efectiva con niños”, expone García-Huidobro en la segunda sesión del taller.

La asertividad parental es beneficiosa para el desarrollo socioemocional saludable de niños, niñas y adolescentes y la promoción de buenos tratos en la familia, según explica García-Huidobro en el taller. Por otro lado, ser padres o madres asertivos ayuda a la mentalización de niños y niñas, entendiendo la mentalización como la capacidad exclusivamente humana de interpretar el significado del comportamiento de los demás, considerando su estados mentales e intenciones subyacentes.

La mentalización de niños, niñas y adolescentes, por su parte, ayudaría a su desarrollo emocional, a la autorregulación y, como consecuencia, a prevenir problemas de salud mental. En palabras de García-Huidobro, “la mentalización crea una base en la salud mental de niños y niñas”.

¿Cómo ser asertivos?

Un elemento fundamental en la asertividad es hablar en primera persona: hacernos cargo de lo que sentimos. Esto implica enfrentar el conflicto y expresar cómo me ha hecho sentir la situación conflictiva: qué emociones siento, cómo las siento.

La idea es poder expresar nuestras necesidades de manera respetuosa y colaborativa, y para esto es esencial encontrar el momento adecuado para conversar. Una de las recomendaciones de la docente es que se evite conversar si nuestros hijos o hijas están en un estado emocional alterado.

“No siempre se dan las condiciones ambientales para tener una comunicación. Lo más importante es que cuando los niños estén en un momento de intensidad emocional, el adulto haga un cortocircuito y detenga la escalada de conflicto”, señala García-Huidobro.

La escalada de conflicto, según explicó la docente en el taller, es la única herramienta que tienen niños y niñas para llamar la atención de sus padres y resolver las dificultades que están sintiendo. “Hay que sacarlo de ese espacio, y cuando esté absolutamente calmado, incluso en otro momento del día, retomar la conversación para poder conversar con más elementos”, explica la docente.

Ser asertivos, encontrar el momento adecuado para conversar, hacerlo en primera persona y expresar nuestros sentimientos permitiría que niños, niñas y adolescentes aprendan sobre los estados emocionales de otros y de sí mismos, y de las consecuencias de sus actos.

“Explicar nuestras necesidades moviliza a niños y niñas, comprenden qué nos afecta. Nadie puede ser asertivo en un cien porciento, pero vale la pena intentarlo porque mejora nuestras relaciones”, asegura la docente.

Para conocer más sobre los talleres disponibles en el Programa de Bienestar y Salud Mental de Santo Tomás visita: https://www.ust.cl/bienestar-salud-mental/.