Educación abordó la importancia del apego durante los primeros años de vida

Webinar destacó el valor que revisten en su desarrollo las prácticas protectoras por parte de los padres hacia sus hijos.

A manera de poder abordar los beneficios que revisten la entrega de cariño y dedicación a los niños y niñas durante sus primeros años de vida, el Área de Educación del IP-CFT Santo Tomás Sede Santiago Centro, realizó la charla “El apego y los buenos tratos como base de los procesos de aprendizaje”.

Encuentro virtual que contó con la participación de Katherine Tahá, Psicóloga y Directora Ejecutiva de Fundación Acompaña, quien abordó la temática desde el punto de vista de las consecuencias que esto brinda para su desarrollo social.

“Hablar de buen trato nos hace ser conscientes de la importancia que tienen las prácticas protectoras, tales como el afecto y el amor para la niñez y que en el futuro, les permitan desarrollar todas sus potencialidades y con la capacidad de sociabilizar”, explicó.

Agregó que “el paradigma de los buenos tratos plantea que es un derecho fundamental de la infancia, el que finalmente garantiza un progreso sano de la mente y de la personalidad. En ese sentido, somos los adultos quienes debemos velar por el cumplimiento de estos derechos”.

Buen trato

Durante su presentación, la psicóloga se refirió a la definición de los buenos tratos infantiles, señalando que “es la capacidad del mundo adulto de proporcionar a la infancia, afectos, cuidados, protección y socialización, el que impacta de manera mucho más fuerte durante los tres primeros años de vida y que son fundamentales para la autoorganización, el funcionamiento y la madurez cerebral”.

“La satisfacción de las necesidades infantiles, así como también el cariño y estimulación psicomotora de calidad y en cantidad suficiente antes de los 3 años, son determinantes para el desarrollo sano del cerebro y sus funciones”, precisó.

Rol del educador

Katherine Tahá destacó el rol que cumplen las educadoras en el desarrollo de los niños y niñas, manifestando que “se tornan figuras que logran representar el apego seguro, entregando una serie de beneficios, tales como vínculos afectivos, entretenimiento, y atención acorde a sus necesidades”.

Según datos de UNICEF, existe un 71 por ciento de niños, niñas y adolescentes que señala haber sido victima de violencia por parte de su padre o madre. De ellos, un 51,5 por ciento declara que fue víctima de violencia física, mientras que un 29,5 por ciento acusa ser víctima de violencia grave. Situación que no ha variado desde el año 2000.

Con relación a esto, Paloma Prieto, Jefa de Carrera de Técnico en Educación Parvularia Sede Santiago Centro, argumentó que “en este escenario, quienes nos encontramos en espacios de cuidado, contención y cuidado de niños y niñas, cumplimos un rol de suma responsabilidad, lo que implica que estamos llamados a trabajar desde el respeto y velar por sus derechos sin ninguna excepción”.

“El trabajo que realizamos en los espacios educativos es fundamental para resignificar lo que tiene que ver con trabajar con cariño, amor y buen trato, incidiendo en un desarrollo óptimo en todos sus sentidos. Por eso, creemos importante el poder abordar temas relacionados con el buen trato y el apego, dado que son significativos y relevantes”, concluyó.