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Analizan principios de las Políticas de Niñez y Adolescencia en Chile
El seminario, organizado por la carrera de Trabajo Social de la Universidad Santo Tomás sede Concepción, congregó a estudiantes y representantes de distintas instituciones que protegen los derechos de los niños, niñas y adolescentes en el país.
La jornada se enfocó en brindar un análisis profundo en el marco de la Convención sobre los Derechos de los Niños, un acuerdo internacional vigente en nuestro país desde 1990 que rige cuatro principios fundamentales: la no discriminación, el interés superior del niño, su supervivencia, desarrollo y protección. Además de su participación en decisiones que le afecten. De igual manera, se abordaron las políticas que rigen el sistema de garantías de derechos de la Niñez y Adolescencia, su impacto en el entorno familiar y los desafíos de la parentalidad.
Natalia Mora Tapia, Directora de Escuela de Trabajo Social de la UST, destacó la importancia que tiene la situación que enfrentan los niños actualmente en una sociedad desigual con altos índices de pobreza y la débil respuesta del Estado respecto al funcionamiento tanto política como del área administrativa en materia de programas que vayan en apoyo a la infancia.
De esta manera, invitó a los futuros profesionales a asumir la responsabilidad que implica en todos que la infancia en nuestro país pueda mejorar, respecto a los programas de atención y a las políticas públicas y sociales que se orientan en los distintos sectores.
Derechos del Niño
Junto con explicar el Convenio Internacional de Derechos del Niño y sus cuatro principios generales, Johanna Sanhueza Sanhueza Coordinadora Técnica de la Fundación Tierra de Esperanza mencionó que, desde que Chile firmó la Convención hace 27 años, el país ha evolucionado en materia de asistencia a las necesidades, carencias, derechos e integralidad de los niños.
“La convención nos obliga a que nosotros los garantes tengamos también las condiciones para que los niños sean legítimamente escuchados. En la medida en la que estemos conscientes podemos hacer un cambio, pues desde el punto de vista metodológico hay que mirar al niño de una manera mucho más amplia, ecológica y sistémica pues ya no es solo el niño, es su familia, el entorno, su cultura y una historia”.
Por su parte, Rubén Salazar Vargas, quien se desempeña como Coordinador Regional del Consejo Nacional de Infancia recalcó que en la Región del Biobío hubo un crecimiento exponencial, después que implementaran políticas para una educación de calidad desde la cuna. “Hoy día vamos a alcanzar un 28% de cobertura, todavía queda un camino enorme por recorrer”, afirma.
“El bienestar de la niñez con un enfoque de derecho, nos permite agrupar los derechos en educación, en entorno familiar, protección, participación y supervivencia. Cuatro millones y medio de personas en Chile son niños y niñas y eso súper importante para las políticas públicas del país”, asegura.
Además, reiteró que se tiene previsto que el Estado apruebe un organismo autónomo el “Defensor de los derechos del niño”, un organismo garante con vinculación internacional y nacional que permite velar por las políticas de los niños, niñas y adolescentes en el país.
Disminución en la familia nuclear
De igual modo, María de los Ángeles Oyarzun Farías Coordinadora de Prácticas y Académica de Carrera de Trabajo Social de la UST durante su ponencia destacó que, desde la perspectiva actual, se percibe un aumento de otras formas de vivir en familia y una disminución en la familia nuclear. “Ser padres en la sociedad actual es cada vez más complejo, por ello a pesar de los factores externo se les pide una adecuada parentalidad y eso implica proteger, educar y cuidar a sus hijos asegurándoles un desarrollo sano”, recalca.
Una vez finalizada la actividad, los ponentes, alumnos y distintos representantes de organismos de protección del niño, niña y adolescente de la región se dispusieron a debatir distintos casos que afectan la realidad familiar en el país.