Subdirector Nacional de Formación e Identidad participó en VII Encuentro Interamericano de Pastoral Educativa en Panamá

Entre los días viernes 2 y sábado 3 de junio, en la Ciudad de Panamá, se realizó con éxito el VII Encuentro Interamericano de Pastoral Educativa, evento que reunió a más de 800 directivos, docentes y agentes de pastoral de Latinoamérica y el Caribe perteneciente a todo el trayecto educativo: desde la formación inicial a la superior.

Representando a nuestra comunidad participó Christian Guzmán Verdugo, Subdirector Nacional de Formación e Identidad, que además es presidente de la Comisión Nacional de Pastoral de Educación Superior de la Conferencia Episcopal. Dentro de los elementos que rescata, aparte de la riqueza del intercambio cultural, nos comenta que «es un paso adelante que, en el Latinoamérica y el Caribe, se siga conversando, dialogando y profundizando en torno al testimonio vital, como primera herramienta de evangelización, ser mejores seres humanos en relación con otros y otras es el puntapié inicial, la chispa que desata todo el proceso evangelizador».

Luego añadió que «esto vale para toda clase de relaciones, pero más aún y con importancia cuando nos referimos a espacios educativos. Si nos tratamos bien, si hacemos del amor la base de nuestras relaciones, estamos siendo testigos de algo más grande: Jesús. Eso es lo fundamental».

Junto a esta temática general, también se profundizó sobre los aprendizajes que nos dejó la pandemia y cómo estos son ahora una herramienta para seguir creciendo en nuestra labor educativa.  

“En tiempos de incertidumbre y constantes cambios, la educación y la pastoral se convierten en herramientas cruciales para afrontar los desafíos del mundo actual”, señaló monseñor Alberto Lorenzelli, Obispo Auxiliar de Santiago, quien tuvo a cargo la presentación inicial del encuentro. “Desde la pastoral -agregó- encontramos una óptica fundamental en la comprensión de la realidad, pero, sobre todo, encontramos en la fe no sólo respuestas de horizonte explicativo sino guía y acción para enfrentarlos. Ambos con su unidad en la propuesta, pero con sus aportaciones específicas, educación y pastoral, son pilares fundamentales para entender y afrontar la vida socio cultural actual.  

Todos estos elementos son un desafío para nuestra comunidad en la tarea incesante y cotidiana de ser coherentes con nuestro sello valórico institucional.