Santo Tomás de Aquino: precursor de la formación basada en la persona
Cada año, nuestra institución dedica una semana a conmemorar la vida, obra y profunda significación que tiene Santo Tomás de Aquino para nosotros como inspirador de nuestra misión educativa.
Elegimos este período en que, como comunidad educativa nos encontramos en pleno desarrollo de nuestras actividades formativas para recordar su figura: hombre de fe, gran filósofo y teólogo, educador insigne y sobre todo una gran portavoz de la palabra de Dios.
Sabemos que de por sí la educación es un proceso formador y emancipador del ser humano, y es desde esta mirada que la obra de Santo Tomás de Aquino nos muestra un claro camino para el desarrollo de un proceso educativo centrado en la persona y en el rescate de su dignidad como tal y que se funda en su naturaleza ya que proviene de Dios mismo y, por lo tanto, toda persona tiende al bien.
De esta manera, la educación la entiende con un carácter profundamente humanista, encaminada hacia la virtud y el pleno desarrollo de las potencialidades humanas en búsqueda permanente de la verdad. En la concepción tomista, el proceso educativo se transforma en una acción fundamental para el ‘ser’ de la persona, donde ‘aprender’ y ‘saber’ son herramientas valiosas, pero en ningún caso la finalidad última. Así, el propósito de la educación en la perspectiva de Tomás de Aquino viene a ser la formación integral de la persona
En los convulsos tiempos que vivimos como sociedad, la propuesta tomista se constituye en una luz de esperanza frente al vacío de una educación que muchas veces se extravía en la sola entrega de instrucción o capacitación para la vida laboral, descuidando el abordaje de la formación valórica y el desarrollo de las facultades intelectivas.
El mundo actual y su complejidad requiere más que nunca de personas integrales, en quienes el conocimiento, la virtud, el razonamiento y la fe se conjuguen para actuar en la realidad de manera activa y transformadora para la búsqueda del bien común y la verdadera felicidad.
A nivel institucional, la invitación es a vivir esta semana reafirmando nuestra adhesión a dichos principios y cobijándonos más que nunca al alero inspirador de nuestro Santo Patrono.