Emilio Guichot: “Acceder a la información es la mejor forma de luchar contra la corrupción, pero no basta”

En el marco del Seminario de Estudios de Derecho Europeo se realizó la cátedra Transparencia en el Derecho de la Unión Europea, a cargo del catedrático y director del Instituto de Investigación García Oviedo de la Universidad de Sevilla, Emilio Guichot.

Como parte del Seminario de Estudios de Derecho Europeo organizado por el Magister en Derecho Público de la Facultad de Derecho de la Universidad Santo Tomás, el martes 20 de julio se llevó a cabo la cátedra Transparencia en el Derecho de la Unión Europea, a cargo del catedrático de Derecho Administrativo y director del Instituto de Investigación García Oviedo de la Universidad de Sevilla, Emilio Guichot.

El objeto de este seminario no solo es realizar investigación aplicada en el ámbito del derecho comparado de la Unión Europea, América Latina y Chile, sino también, y sobre todo, producir conocimiento para la comunidad académica”, señaló el coordinador nacional de postgrado, Dr. Enrique Díaz, al inaugurar la actividad.

El catedrático Emilio Guichot centró su presentación en la legislación del acceso a la información y la transparencia en países de Europa y América, desde una perspectiva comparada.

Acceder a la información es la mejor forma de luchar contra la corrupción y de avanzar hacia un gobierno abierto, pero no basta”, sentenció el catedrático Guichot al comenzar su exposición.

Las leyes sobre transparencia y acceso a la información se han expandido y generalizado en el mundo, según explicó Emilio Guichot. Así, en la actualidad casi todos los países del mundo cuentan con una ley de acceso a la información.

Las leyes sobre transparencia y acceso a la información se han expandido y generalizado en el mundo, pero no basta tener una ley avanzada, debe existir voluntad de respetarla y disposición a cumplirla y a facilitar su cumplimiento”, señaló el catedrático. Para que la transparencia sea real debe haber un control real e independiente”, agregó.

La sociedad civil también juega un rol importante en la vigilancia de la transparencia, principalmente las organizaciones no gubernamentales (ONG) y los periodistas.

Consenso jurídico

Ante la pregunta de si el acceso a la información es un derecho fundamental o no, el catedrático Emilio Guichot concluye que, por lo revisado en distintos países del mundo, se puede reconocer un consenso jurídico. Como él mismo lo explicó:

Se ha alcanzado un consenso jurídico de que el derecho a acceder a la información es fundamental; como derecho autónomo o como parte del derecho a la libertad de información, se ha posicionado como un derecho fundamental”.

Como tal, la mayoría de las leyes de acceso a la información garantizan el derecho a todo ciudadano o ciudadana, sin exigir una explicación del motivo o el interés por acceder a la información solicitada. Al menos en América y Europa, como expuso Guichot, “no se exige motivar las solicitudes ni acreditar identidad del solicitante”. Y, en la práctica, en la Unión Europea no se discrimina por nacionalidad del solicitante.

Limitaciones al derecho

Como todo derecho, el derecho al acceso a la información y la transparencia está limitado por otros derechos y protecciones. “En todas las normas del mundo hay límites a la transparencia”, expuso Guichot. “Una transparencia ilimitada sería una renuncia a la presencia del Estado”, agregó.

Siguiendo el argumento del catedrático, la transparencia tiene límites cuando se trata de asuntos de seguridad del Estado o de la protección de las personas. Por ejemplo, existen límites en el acceso a datos íntimos de las y los ciudadanos o a la información sobre la estrategia de combate al narcotráfico.

La transparencia se somete a un doble test: test de daño, que evalúa si dar información supondría un riesgo o perjuicio a intereses públicos y privados protegidos, y test de ponderación entre intereses, relevando siempre el derecho a la información”, explicó el expositor.