“Nos hemos comprometido con el desarrollo de capacidades de enseñanza socioemocional”

El jueves 22 de abril se inauguró el año académico del área de Educación del Instituto Profesional y Centro de Formación Técnica Santo Tomás con la participación de más de 1.400 asistentes y la exposición de dos destacados profesionales especialistas en educación socioemocional: Rafael Bisquerra, presidente de la Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar, y Arnaldo Canales, presidente Fundación Liderazgo Chile e impulsor de la Ley de Educación Emocional en Chile.

“Veremos cómo el desarrollo de habilidades socioemocionales va a aportar en la construcción de una sociedad más consciente, inclusiva y que valore la diversidad; y en nuestro propósito por mejorar la calidad de la formación, nos hemos comprometido con el desarrollo de capacidades de enseñanza socioemocional, porque queremos formar técnicos y profesionales que aporten a la construcción de esta nueva sociedad”, comentó Claudia Taiva Araya, directora nacional área Educación IPCFT ST, al inicio de la actividad.

Rafael Bisquerra, presidente de la Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar, expuso sobre la importancia de la educación emocional, especialmente en el contexto de pandemia. “La pandemia vino a sacarnos el velo, a mostrarnos de qué estábamos hechos; nos presentamos vulnerables como en un espejo, y nos encontramos con muchas emociones que nos obstaculizaron nuestro bienestar”, señaló. Este contexto hace urgente que las escuelas pongan atención a las emociones que están sintiendo niños, niñas, adolescentes y también docentes, y que potencien una educación orientada al desarrollo de competencias emocionales. “La inteligencia emocional es identificar las emociones, comprenderlas y gestionarlas para relacionarnos con otros”, explicó. La identificación de las propias emociones, el reconocerlas, nombrarlas y saber abordarlas, hará posible que la relación con el entorno, con los demás, sea más sana, por eso es importante el enfoque socioemocional.

Arnaldo Canales, presidente de la Fundación Liderazgo Chile, compartió el diagnóstico de Bisquerra. “Cuando somos capaces de conocer nuestro mundo interno y regular este mundo emocional, también vamos a poder lograr establecer relaciones mucho más sanas en la cotidianeidad”, expuso. La educación emocional requiere tomar conciencia de cómo nos estamos sintiendo; es un aprendizaje vital para el desarrollo del ser humano. Esta educación aborda tres dimensiones: conciencia emocional, autoregulación emocional y autonomía emocional. También existen las emociones morales, en las que Canales centró su presentación. Estas son las que generan en las personas la preocupación hacia otro ser humano o ser vivo, es decir, la conciencia del entorno. Entre estas emociones encontramos la compasión, por ejemplo, que permite a las personas ser sensibles al sufrimiento propio y al de los demás, y a partir de esto actuar de manera responsable, con intención de aliviarlo y prevenirlo.

Las charlas magistrales y el enfoque en la educación socioemocional causaron gran interés entre las y los asistentes a la inauguración del año académico del área Educación, quienes participaron haciendo diversas preguntas a través del chat. Todos coincidieron en la importancia de comenzar a incorporar el desarrollo de capacidades socioemocionales en la formación de educadores, incluso los mismos estudiantes conectados.