La académica y directora del área Ciencias Sociales de Santo Tomás sede Los Ángeles, estuvo en radio La Sabrosita conversando sobre temas de interés y contingencia. Analizó junto al periodista Sebastián Ibieta, una de las problemáticas que más se ha agudizado durante la crisis sanitaria por el COVID19. Revisa a continuación sus declaraciones más destacadas.
El Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género registró 43 femicidios durante el año pasado. En el 2021 se han producido dos.
Invitó también a todos y todas las estudiantes con vocación de servicio e interesadas en estudiar estos temas, a conocer más de la carrera Técnico en Trabajo Social del Instituto Profesional Santo Tomás Los Ángeles y sus posibilidades de articulación con la carrera de Servicio Social.
HAY QUE HABLAR EN CASA «Cuando hablamos de Violencia de Género hablamos de muchos tipos de violencia. Hoy en día, obviamente, una de las que ha crecido fuertemente, producto de la pandemia, y el encierro, ha sido la violencia intrafamiliar. Otros tipos de violencia también van creciendo de modo preocupante en la sociedad. Es un tema que tenemos que abordar y comenzar a conversar en nuestras casas».
VIOLENCIA NATURALIZADA «Hay aspectos que por mucho tiempo se naturalizaron respecto a temas de convivencia. Muchas veces pensamos que eran normales y no lo son. Antiguamente el zamarreo o el tironcito de pelo, a veces para llamar la atención, no era mayormente criticado o condenado socialmente. En los conflictos familiares tiende a existir el mito de que en el hogar, en lo privado, en lo doméstico no hay que inmiscuirse. Pero hoy en día, por como está el escenario social, es momento de inmiscuirse. Es momento de que el Estado proteja a las mujeres que sufren violencia».
VIOLENCIA SIMBÓLICA Y MEDIÁTICA
«Los medios de comunicación tienen la responsabilidad de ir construyendo discursos distintos a partir de la figura de la mujer. Hay un escenario cultural que debemos modificar».
LEGISLACIÓN INSUFICIENTE «En Chile tenemos la ley 20066, ley de violencia intrafamiliar, que protege a las mujeres, adultos mayores y a los niños, pero nos hemos dado cuenta de que eso no basta. Necesitamos como país una normativa integral de protección a la mujer. El sistema está mal estructurado, porque no deberían generarse todos los femicidios. Tenemos mujeres que hacen las denuncias, los agresores están con medidas de alejamiento o precautorias y aun así las mujeres siguen muriendo. Es importante replantear este sistema. Lamentablemente en el congreso duermen muchos proyectos de ley para establecer mejoras pero estas iniciativas no son aprobadas».
ACOMPAÑAMIENTO DURANTE TODO EL PROCESO «Cuando se hace una denuncia lo importante es que se llegue al final de todo el proceso. La denuncia es el punto de partida recién. Para cambiar o salir de una situación de violencia Es importante que las mujeres sientan la confianza. Las redes sociales del Estado y las familiares son importantes para apoyar a la mujer en estos procesos. No hay que dejarlas solas. Las estadísticas dicen que para que una mujer denuncie tienen que pasar desde 5 hasta 10 años, para asumir que existe un circuito de violencia. Existen varios factores para ello: El miedo a perder el hogar o los hijos, la dependencia económica. Por lo tanto es fundamental el acompañamiento una vez que una mujer se decide a denunciar».
